El asesinato del presidente de Chile, Dr. Salvador Allende
Gossens
“Allende: autopsia
de un crimen”
Para: Dr. Luis Ravanal Zepeda, Vicepresidente de la Asociación
mundial de medicina legal/World association for medical Law/WAML
DE: Prof. Hugo Moreno Peralta/IWA. Secretario Ejecutivo
Addhee.Ong
Asunto: Documentos
adjuntos Magnicidio del Presidente de Chile Dr. Salvador Allende Gossens,
exigiendo- los derechos, se respetan- verdad y justicia.
Estimado
Dr. Ravanal Zepeda:
Los tiempos actuales tienen un estado de ánimo prevaleciente
el de una perplejidad impotente. Nos vemos arrastrados a unas malditas guerras genocidas que los
dueños de la celestina universal imponen por ser el mejor negocio la
fabricación y venta de armamento para la clase oligarca empresarial
plutocrática que controla el sistema capitalista determinista
globalizado/hegemónico a través del régimen estadounidense la tiranía más
despótica, perversa, desalmada e inmoral.
Cada año reiteramos
al Pleno de la Corte Suprema, la Corte Penal Internacional/CPI, el Consejo de los Derechos Humanos de
Naciones Unidad/en Ginebra, Suiza, la Corte Interamericana de los Derechos
Humanos, la Comisión Interamericana de los Derechos Humanos/OEA, nuestra
exigencia de verdad y justicia en el asesinato del Presidente de Chile Dr.
Salvador Allende Gossens. En el contexto del perverso hábito negativista/resignado,
el olvidar para negar que impusiera la dictadura cívico militar
fascista/vigente, se nos ha ignorado...
Nosotros asumimos
la histórica reflexión del compañero presidente Dr. Salvador Allende Gossens
en e congreso de la Unión de
México, diciembre/ 1972, “los pueblos sin memoria histórica, nada
significan ni nada valen. Hay que honrar a aquellos seres humanos que dieron
sus vidas y su existencia por dar contenido, forma y perfil a nuestras
nacionalidades”...
La Corte Suprema de Justicia no
puede seguir tapando el sol con un dedo
Estimado Dr. Ravanal Zepeda, su trabajo profesional/vocacional, exigiendo la ciencia por /para la vida como
palanca de bienestar, progreso y de justicia plena. Especialmente en el
magnicidio del presidente Dr. Allende Gossens, su exigencia de verdad y justicia en este
alevoso crimen de lesa Humanidad sea
convertido en forma moral de
esperanza para la mayoría marginada del Pueblo
Chileno, su aclaración será una
catarsis para Chile y los años de dictadura cívico militar fascista
dejarán de ser hoyos negros en la
historia contemporánea para convertirse en experiencia racionalizadas
colectivamente sobre la base del respeto por la ciencia, la ley, la lógica y
las norma morales.
Estimado Dr. Ravanal Zepeda, “luchar es vivir”, ésta
acción fecunda exige continuidad del
esfuerzo, especialmente cuando se trata de la verdad. Todo progreso moral es el
triunfo de la verdad sobre la mentira.
Así lo señala palmariamente sus publicaciones científicas especialmente
en el crimen de lesa humanidad cometido contra el presidente Dr. Allende
Gossens. Según nuestro asociados su última publicación “Allende autopsia de un crimen”, compartida con el
sociólogo Francisco Marín Castro,
debería constituir la base de una
presentación al Pleno de la Corte Suprema con el aporte de nuestros juristas de los Derechos Humanos exigiendo
verdad y justicia. Jueces, magistrados, abogados reconocen
en privado y públicamente que en la causa Rol 77-2011, sobre la muerte
física del presidente de Chile Dr. Salvador Allende Gossens, el cierre del
sumario constituyó una impunidad manifiesta,
porque no se puede legalmente sobreseer una causa
definitivamente, existiendo diligencias pendientes. ¡Se equivocó el juez instructor Mario Carroza!
Se puede y debe corregir el error si se tiene valor de confesarlo cuando se le
ha demostrado su error. En cambio, quien carece de lealtad y honestidad para
reconocer sus errores, es tanto más
despreciable cuando mayor es su empecinamiento. El que miente es una
falsario, capaz de torcer la verdad, de
embrollarla, de corromperla, de perseguirla. Los individuos que
sobreviven inmoralmente aborrecen la verdad y caen siempre en la cobardía de
mentir.
Todo error
con sincero reconocimiento merece consideración y reparo.
Es en cambio, despreciable la hipocresía del que oculta sus ideas por venales
motivos y es criminal la mentira del que la enseña, difunde a sabiendas por
torpes conveniencias: su cobardía moral es tan infame que ninguna pena podría
aumentar su vergüenza y la de todas, las cobardías consisten en callar la
verdad para recoger las ventajas que le ofrece la complicidad con la mentira.
Le reitero los sentimientos de mi más alta consideración
y estima.
Prof. Hugo Moreno Peralta
Secretario Ejecutivo Addhee. Ong
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