miércoles, 27 de marzo de 2019

Los jóvenes de Puerto Rico y de todo patio trasero de América Latina, "carne de cañón" en el Ejército imperialista de Estados Unidos.


Los jóvenes de Puerto Rico y de todo el patio trasero de América Latina, "carne de cañón" en el Ejército imperialista de Estados Unidos.


Por Leo Martinez/USA ARMY


Puerto Rico no solo está sometido a Estados Unidos por un duro control fiscal y a un estatus ambiguo respecto a su soberanía. Ante la falta de perspectivas laborales en la isla y sin mucha información a mano, varios jóvenes terminan convencidos por los reclutadores del Pentágono y se alistan. Esto ha dejado serias secuelas en miles de puertorriqueños.
Sonia Santiago Hernández es la fundadora de Madres contra la  maldita Guerra, un colectivo de mujeres que alza su voz contra esta práctica. Hace 15 años su hijo, estudiante de magisterio, pasó a formar fila de las Fuerzas Armadas estadounidenses, convencido por un reclutador. No le dijo nada a sus padres, dada la postura contraria a la presencia de Estados Unidos en Puerto Rico que impera en la familia.

Gobernador de Puerto Rico vuelve a criticar a Estados Unidos por su política hacia la isla
Corría el año 2003 y, tras la ocupación de Afganistán – por el control del narcotráfico del opio -, Washington decidió arremeter ese año contra Irak, bajo la excusa jamás probada de que el Gobierno de Saddam Hussein tenía armas de destrucción masiva bajo su poder.
"Mi hijo fue de las primeras tropas que entró a Irak aquel 19 de marzo del año 2003, con el propósito de Estados Unidos de usurpar el petróleo. Estuvo 18 meses en Irak. Yo decidí transformar mi angustia en acciones de alerta a los jóvenes puertorriqueños", es la presente entrevista con Sputnik Sonia Santiago Hernández.

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Puerto Rico
"Estados Unidos trata con desdén e indiferencia a Puerto Rico, como a todos los países de su patio trasero/ Latinoamérica"
Como el hijo de Sonia, muchos estudiantes caen en las garras de estos funcionarios, que buscan engrosar las tropas del Pentágono. Los reclutadores tienen acceso a estos ámbitos. Ante la promesa de nuevos horizontes y posibilidades de crecimiento personal y profesional, muchos firman su contrato de muerte.
En un país donde prácticamente la mitad de la población depende de ayudas del Gobierno para la alimentación, con altas tasas de desempleo juvenil, y bajo rígidas medidas de austeridad impuestas por una Junta de Control Fiscal (que ata de pies y manos a la isla por su deuda de 70.000 millones de dólares), hay quienes aceptan este camino, sin ser conscientes de que "el alistamiento militar es una forma adicional del gancho que tiene EEUU sobre Puerto Rico", comentó la activista.

"Pero por sobre todo los utiliza para su agenda de ocupación y usurpación de recursos naturales y todo lo que tiene que ver con la hegemonía geopolítica de EEUU en el mundo en sus cientos de bases", aseveró Sonia Santiago Hernández.

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Tras su paso por Medio Oriente, el hijo de Sonia se volvió "una persona completamente incapacitada". La experiencia en el campo de batalla le dejó síntomas del síndrome de estrés postraumático, como insomnio, pesadillas, ansiedad y nerviosismo.
La fundadora de Madres contra la maldita Guerra, psicóloga de profesión, subrayó que a raíz de su exposición a explosiones, muchas veces quienes vuelven con estos síntomas, "no tienen la capacidad cognoscitiva y emocional de poder estudiar y concentrarse". Otros terminan suicidándose.

-         En el capitalismo salvaje globalizado la vida no vale nada


Pero su hijo sufrió además "daño musculoesqueletal, osteoporosis y osteoartritis", producto de la inobservancia de los protocolos al momento de suministrar la vacuna contra el ántrax. Entre una y otra dosis, deben correr algunos meses. Sin embargo, denunció Sonia Santiago, una dispensa establecido por la Administración de Bill Clinton habilita a que se repitan las dosis al cabo de un par de semanas.

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Otros sufren daño traumático cerebral una vez que el cerebro se sacude dentro del cráneo al presenciar una explosión. Son apenas algunas de las secuelas graves que deja la guerra en los veteranos, y los puertorriqueños no son excepción.
Por otra parte, al volver no tienen una infraestructura de apoyo al veterano de guerra insuficiente: hay un solo hospital que cubre en toda la cuenca del Caribe a todos los veteranos de todas las malditas guerras, y "no tiene sala de trauma", por lo que quienes sufrieron un daño neurológico no tienen cómo tratarlo, indicó la activista.

Esto, sin contar el efecto de agentes químicos como el uranio reducido, "un metal pesado que se utiliza como punta de lanza para derretir el blindaje del enemigo". Expuestos a la sustancia, ingresa por los poros y se aspira, y provoca efectos neurológicos adversos.

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En ocasiones, en base a testimonios de excombatientes, Sonia Santiago afirmó que las alarmas de ataque bioquímico en los campamentos se activan por la concentración de esta sustancia y otras en los uniformes de los efectivos.

Una historia centenaria

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El alistamiento de puertorriqueños en las Fuerzas Armadas estadounidenses lleva más de 100 años, como subrayó Sonia Santiago. Con la invasión a Puerto Rico en 1898, los estadounidenses establecieron una corte militar para aquellos colonos y residentes que no acataban las órdenes del nuevo ocupante. Para entonces, los habitantes de la isla habían logrado una concesión de mayor autonomía de la corona española, de la cual dependía.
En 1917, con la presencia de Estados Unidos en la isla ya vuelta un hecho, una ley del Capitolio "impone" la ciudadanía estadounidense a los puertorriqueños. Como recordó Sonia Santiago, esto conlleva el reclutamiento forzado de los jóvenes al cumplir los 18 años". Así, unos 18.000 boricuas debieron servir bajo pabellón estadounidense en la Primera Guerra Mundial (1914-1918).

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La ciudadanía estadounidense a los hijos de puerto rico fue una imposición por el ocupante, imperialismo yanqui

No fueron excepción los otros conflictos en los que rigió la conscripción. Durante la Segunda Guerra Mundial, se estima que fueron más de 60.000; en la Guerra de Corea, casi 70.000; en la Guerra de Vietnam, prácticamente 50.000. Hoy en día, según el censo de 2010, hay 2.000 veteranos sin techo en Puerto Rico. En la llamada "guerra contra el terrorismo", cientos 124 puertorriqueños perdieron la vida: ¿ quién los recuerda? Y  a su familia ¿quién la protege?

"No es ahora nada más. Ellos nos han usado como carne de cañón desde entonces. Han muerto miles de puertorriqueños. Y muchos sobrevivientes vuelven enfermos de la maldita guerra", denunció la activista.
La presencia del nuevo Comando Geográfico del Caribe

En los últimos días comenzó a operar el Comando Geográfico del Caribe en Puerto Rico. Este agrupa cinco batallones, con unos 5.000 miembros, que proveerá una de las mayores concentraciones militares en la historia de la isla.
La decisión de unificar batallones y simplificar las cadenas de mando se justifica, en teoría, para acelerar la capacidad de respuesta ante catástrofes naturales, como el paso del huracán María en 2017. En los medios locales, además, se subrayó la inyección de 285 millones de dólares anuales que esto implicaría en la isla.
Sin embargo, esta medida genera suspicacias en algunos de sus habitantes, en base a datos históricos.
"Cuando gana las elecciones Ronald Reagan, incursiona en la guerra en Centroamérica, y Puerto Rico tiene que ver muchísimo que ver, porque desde aquí se han invadido países hermanos", indicó Sonia Santiago Hernández.
"No me cabe la menor duda de que esto es una agenda del Ejército de EEUU para que los puertorriqueños que saben español participen de ser necesario en una agresión contra Venezuela", agregó la activista de Madres contra la maldita Guerra.

En el caso de la crisis provocada por los huracanes Irma y María, recordó, se ofreció ayuda de "médicos, personal y brigadas de restablecimiento de energía" de Cuba, Venezuela y México, que fue rechazada por Estados Unidos.
Por otra parte, recordó que la acción de Estados Unidos para paliar la situación de la isla en esas circunstancias demoró. Trump visitó Puerto Rico "y hasta se mofó de los puertorriqueños" al repartir personalmente papel higiénico, aseguró la entrevistada.
"De todos los países latinoamericanos querían ayudar y Estados Unidos dijo que no. Entonces nos sometieron, como siempre, a su bota", opinó la referente de Madres contra la  maldita Guerra.
Educación en vez de armas
Las sanas ambiciones de los jóvenes son muchas veces el elemento determinante que los lleva a firmar un contrato con las Fuerzas Armadas, que los vincula por un mínimo de ocho años: cuatro en actividad y otros cuatro en reserva. La entidad exhorta a buscar alternativas de formación técnica y becas. Pero una vez en las armas, muchos se dan cuenta de que ese no es su camino. Aún ahí no es demasiado tarde.
"Además de orientar a la juventud para que no firmen un contrato militar tenemos una campaña activa de objeción por conciencia para los militares. Entendemos que se le da muy poca información a los militares de sus derechos y uno de estos es que en su contrato hay una cláusula que establece que ellos por razones éticas, morales o religiosas pueden acogerse a la objeción por conciencia", dijo la activista.
Sonia Santiago Hernández
Fundadora de la Madres de Puerto Rico contra las Malditas Guerras.
Lo subrayado es nuestro.





Elecciones en los Estados unidos:
¿Puerto Rico, el estado Nº 51?
El 61% del enclave Colonial Puerto Rico pidió anexarse a los Estados Unidos. De acuerdo al Art. IV de la constitución de los Estados Unidos, es el congreso el que decide qué territorio se anexan y en qué condiciones, en el marco de la libertad y la democracia “en la medida de lo posible”.
Para el movimiento independentista Puertorriqueño que lucha por el Derecho a la autodeterminación e independencia de Borinquén, fue una amarga derrota. Por su dignidad y respeto por la historia el Pueblo Puertorriqueño que en su mayoría no participa en el montaje eleccionarios manipulado e impuesto desde Washington, seguirá exigiendo respeto y un proceso serio de descolonización bajo el control de Naciones Unidas. Desgraciadamente la ONU depende del dinero del gran padrino de la Casa Blanca. Un círculo vicioso de nunca acabar.
Según la Ley estadounidense, Puerto Rico es “un estado libre asociado”, es decir, pertenece a los Estados Unidos, pero no forma parte de él. ¡Abráse visto tamaña vesania!
Ahora, es ingenuo pensar que el congreso estadounidense si acepta la reciente petición de anexión les otorgara la plena ciudadanía estadounidense a los habitantes de Puerto Rico. Hoy son estadounidenses por estatuto y no tienen derecho a votar en territorio norteamericano, es decir, son ciudadanos de cuarta categoría.
Sin lugar a dudas, lo que más les dolió a los dirigentes del movimiento independentista Puertorriqueño fue el silencio de Gobiernos, dirigentes y organizaciones progresistas de la Patria Continente, Latinoamérica, que en el pasado les apoyaron. Hoy, han guardado un silencio oportunista y cobarde. El tartufismo Latinoamericano carente de imaginación asume la ideología de que “El fin justifica los medios”. Los hipócritas –la hipocresía es el homenaje que le rinde el vicio a la virtud-, que no creen en el valor de las ideologías revolucionarias de los pueblos sometidos, se equivocan con el Pueblo de Puerto Rico y sus dirigentes del movimiento independentista. La lucha continuará, porque es preferible morir luchando que vivir de rodillas, como reiteradamente lo han afirmado los dirigentes independentistas.
Los tartufos dirigentes pragmáticos contemporizadores de Latinoamérica esquivan la responsabilidad frente a la tragedia del Pueblo Boricua. Audaces en la traición y tímidos en la lealtad, están convencidos, “que pecar en silencio no es pecar”.
Cuando las miserias morales asolan a un país, culpa es de los traidores politicastros pragmáticos contemporizadores que vendieron sus ideales por un plato de frijoles, que no tienen patria y que han vivido parasitariamente de la limosna que les entrega el gran padrino desde la Casa Blanca.
El que predica la verdad y transige con la mentira, el que predica la Justicia y no es justo, el que predica la lealtad y traiciona, el que predica el patriotismo, el socialismo y se arrastra frente al odioso imperialismo yanqui y le niega la Solidaridad al Pueblo de Puerto Rico,  no es un hijo digno de la Patria Continente, Latinoamérica, de : Francisco Miranda, Simón Bolívar, José de San Martin, Bernardo O’Higgins, José Artigas, José Martí Pérez, Benito Juárez García, Augusto Sandino, Ernesto Guevara de la Serna, Salvador Allende Gossens, Etc.
Un dirigente político revolucionario consecuente va por caminos rectos sin reparar que sean ásperos y abruptos. No transige con los enemigos de su pueblo por algún vil interés económico. Cree en sí mismo, y en sus principios sin pactar con los enemigos de la Humanidad.
La historia verdadera la hacen los pueblos y la de Puerto Rico la está haciendo su pueblo: “para quitarnos la Patria, primero tienen que quitarnos la vida”. Pedro Albizu Campos.

Prof. Moreno Peralta/IWA
Secretario Ejecutivo Addhee.Ong


La violencia de cada día en el Chile Virtual.


La violencia de cada día en el Chile Virtual.

Por Juan Pablo Cárdenas S., Escritor/ comunicador social:

Es muy explicable el impacto mundial causado por el ataque perpetrado por dos jóvenes brasileños al establecimiento educacional de donde habían egresado, en una masacre que provocó la muerte de unos diez estudiantes y maestros. Un horror que suele ser frecuente en los Estados Unidos, pero no tanto en América Latina donde los grados de violencia son también muy altos e insensatos.

Las pavorosas imágenes transmitidas por nuestros canales de televisión y por internet han llevado a algunos comunicadores a sostener que, en relación a otros, Chile escapa o apenas roza la lacra de la violencia criminal. Sin duda una pretensión similar a aquella falsa creencia de que tampoco en nuestro país existen los índices de corrupción que afectan a otros países, pretensión que en poco tiempo se ha desmoronado con los severos y reiterados ilícitos cometidos por la clase política y empresarial, además de los fraudes y desfalcos millonarios de Carabineros y cada una de las ramas de la Fuerzas Armadas: “la reserva moral de la sofofa”...


Sin duda, todavía salvamos de acciones tan espeluznantes como la ocurrida recién en Sao Paulo, pero en ningún caso podríamos negarnos a que el fenómeno de la violencia ya está entronizado en nuestra sociedad, en sucesos registrados cotidianamente por nuestra prensa y muy especialmente la Televisión. Por sobre lo que sucede en la política, la economía, la cultura o el mismo deporte, son los portonazos, los asaltos callejeros, los femicidios y tantos otros delitos los que más destacan los principales titulares de nuestros medios de comunicación. Al mismo tiempo que los sondeos de opinión pública constatan la creciente preocupación de los chilenos respecto de su seguridad, tanto que ya se ha consolidado en un lucrativo negocio la venta de todo tipo de servicios para registrar e identificar las acciones delincuenciales en los barrios, calles y viviendas de todo el país.

Es curioso, pero ya no existe asalto o despropósito criminal que no sea registrado por las cámaras instaladas por doquier a lo largo y ancho del país y cuyas imágenes, por supuesto, sirven de valioso material periodístico para los noticiarios de TV, así como para alimentar el morbo de los cibernautas. Ninguna estadística nos señala, sin embargo, que estas medidas y recursos, como los propios drones de la policía y las municipalidades, nos estén previniendo realmente de tales delitos. Por el contrario, todo indica que un porcentaje muy alto de la población ya ni siquiera denuncia muchos de estos atentados, en la desconfianza que ha crecido respecto de la probidad y eficiencia de las policías, jueces y fiscales.

Al mismo tiempo que se agota la capacidad de las cárceles para encerrar a tantos infractores, son ahora los gendarmes de nuestros numerosos penales los que se quejan de ser acusados por su presunta complicidad con los internos dispuestos para su vigilancia y cuidado. Porque también los opinólogos, que tanto abundan en nuestros medios, han descubierto que es rentable al raiting especular con la idea de que existe en la administración de justicia una puerta giratoria para que los delincuentes entren a las cárceles, pero vuelvan prontamente a las calles prácticamente impunes.

Si la delincuencia no siguiera creciendo y alarmando cada vez más a los chilenos, el régimen no estaría impulsando una ley para que las policías puedan hacer “controles de identidad” a partir de los 14 años de edad, iniciativa de la cual Piñera dice contar con un masivo apoyo ciudadano, aunque su propuesta está recibiendo el repudio de las organizaciones de Derechos Humanos y de protección a la niñez.


El combate contra la delincuencia en general e infantil y juvenil en particular: por el oráculo mercurial y su compinche la fundación Paz Ciudadana


Se sabe que la violencia que asola a tantos países es directamente proporcional a sus índices de pobreza, pero sobre todo de desigualdad entre sus habitantes. Además de comprobarse que no basta con otorgar más recursos a las policías o hacer cada vez más sofisticado los sistemas de vigilancia callejera para purgar este mal, cuyas alarmas y “botones de pánico” ahora están en cada vehículo, cuanto, en barrios y casas, además de bancos, estadios y toda suerte de recintos públicos y privados.

En el caso chileno, los gobernantes y parlamentarios son muy diligentes en aprobar leyes y normas para hacer frente a la violencia, otorgándole mayores fueros a las policías para enfrentar el descontento social.  De forma que otra vez un carro lanza aguas ha provocado lesiones graves a una estudiante de la Universidad Católica de Valparaíso que desfilaba como los centenares de miles de mujeres en su Día Internacional. Pero lo que no existe son medidas y correctivos para redistribuir el ingreso, elevar el salario mínimo y las posibilidades de empleo, aumentar el monto de las pensiones, hacerles frente a las especulaciones de las farmacias y laboratorios, entre tantas otras lacras que alimentan la decepción y estimulan la violencia. Así como tampoco se encara eficientemente el creciente tráfico y consumo de drogas que condena a una enorme cantidad de menores a abandonar sus estudios y desahuciar una vida digna. Todo esto porque, por mucho tiempo también se creía que el narcotráfico era un tema ajeno y que Chile era a lo sumo un pasadizo de la droga, pero sin que ésta llegara a ser consumida por nuestra población.

Esta pretensión de sentirnos superior a nuestros países vecinos, o creernos “un país mediterráneo, pero en un mal barrio” (como llegó a escribirse) nos ha conducido a enfrentarnos tardíamente a los problemas más acuciantes de nuestra población. Haciendo gala de una arrogancia que se expresa en darle la espalda al continente y renunciar, por ejemplo, a la posibilidad de enfrentar más coordinadamente con nuestros vecinos problemas que nos son comunes y traspasan nuestras demarcaciones geográficas.

Renuentes a aceptar, en realidad, que hay naciones de nuestra región en verdadera posibilidad de hacerse más soberanos, ricos y promisorios en relación a un país prácticamente mono productor y cuyas reservas naturales están hipotecadas al extranjero, bajo la férula estricta del colonialismo. Con un sistema institucional vergonzoso, además, si se considera que es hereditario de la constitución pinochetista de 1980. Por lo cual mantenemos un severo pendiente democrático, si se considera la pobrísima participación ciudadana, la consiguiente falta de legitimidad de las autoridades, el descalabro general de los partidos políticos y la ausencia de organizaciones sociales.

La criminalización de la lucha del Pueblo Mapuche por sus derechos y su tierra.


Añadiendo a lo anterior, el déficit de ser uno de los pocos países de América Latina que todavía no reconoce su plurinacionalidad y mantiene una larga guerra racista y de ocupación en territorio mapuche. Un conflicto que suma cada día más víctimas y luctuosos episodios. Sin descartar ahora el riesgo de que todo remonte y alimente la posibilidad de otro quiebre institucional, una confrontación como la encarnizada Revolución de 1891, o nos condene a hechos de violencia tan inauditos como el bombardeo a La Moneda en 1973 y el magnicidio de los dos últimos presidentes constitucionales. Episodios que hablan, más bien, de que siempre en nuestra historia hemos estado a la cabeza de los países más violentos de la Región, donde los atropellos a la paz social son nuestro pan de cada día.


Aunque, de momento, escapemos de aquellos hechos terroristas de nuestro pasado no tan remoto, por lo demás. Probablemente porque siempre han sido instigados y ejecutados por la ultraderecha, muchos de cuyos activistas hoy son los que nos gobiernan y siguen al abrigo del poder.


Lo subrayado es nuestro.

martes, 26 de marzo de 2019

A propósito de la Doctrina Monroe: “Amerika First para los Amerikanos/yanquis”.



A propósito de la Doctrina Monroe: “Amerika First para los Amerikanos/yanquis”.


Por Pascual Olivas López:
John Bolton ha realizado unas extraordinarias declaraciones en las que ha afirmado que la actual administración de Estados Unidos se guía por los principios de la “Doctrina Monroe” en sus políticas hacia América Latina, donde Washington quiere un cambio de régimen en Venezuela, Nicaragua y Cuba.

Desde el punto de vista ideológico, estas afirmaciones resumen la base teórica del “giro a la ultra derecha” que ya comenzó la administración Obama cambiando gobiernos progresistas sudamericanos cuando los gobiernos de izquierdas intentaban defender su soberanía y ser autónomos y Estados Unidos respondía instalando regímenes de derechas dependientes de Estados Unidos [como ocurrió en Honduras con Hillary Clinton al frente del Departamento de Estado-Ed].

El motivo de estos movimientos está evidentemente ligado al hecho de que un giro a la izquierda amenaza la posición de Estados Unidos en la región y puede llegar a crear para China una plataforma para extender su influencia (con inversiones financieras y de infraestructura, cooperación técnico-militar, la malograda estación espacial en Argentina, el canal de Nicaragua, etc.) en lo que Estados Unidos llama su “patio trasero”. Los cambios de régimen progresistas son vistos como una forma de acabar con tendencias antiestadounidenses.
Sin embargo, la administración Obama evitó a toda costa cualquier asociación con la “Doctrina Monroe”, ya que defendían una agenda neoliberal de intervencionismo en todo el planeta, no solo en un continente.

En la época de Trump, las cosas han cambiado drásticamente: África se ha convertido en un campo de lucha por las esferas de influencia en el que activamente participan China y Rusia. Estados Unidos ha sufrido una dura derrota en Oriente Medio y ha perdido el control completo de la región. En el Extremo Oriente, la República Popular de Corea ha conseguido desarrollar armas nucleares y China muestra cada vez más deseo de que cambie el statu quo. Objetivamente, Estados Unidos no puede controlarlo todo, de ahí que se hable del sistemático debilitamiento de su influencia a escala global.

La idea ahora es recuperar posiciones en el hemisferio occidental y las referencias a la Doctrina Monroe son un paso hacia el reconocimiento de nuevas realidades en las que la hegemonía absoluta parece fuera de lugar, pero el deseo de consolidarse en la “esfera de influencias natural” lleva a la vuelta del “viejo imperialismo”, ese que hace no tanto tiempo la propaganda de los medios mediáticos de (in) comunicación globalizados neoliberal presentaba como un desfasado fenómeno inventado por Marx y Lenin. Ahora a Estados Unidos ya no le avergüenza esta “vuelta al pasado” en la que la administración de la Casa Blanca abiertamente habla de la necesidad de controlar América Latina como ya hiciera Estados Unidos en los siglos XIX y XX.
Los principales objetivos del “programa” incluirán:

1.            Eliminar cualquier influencia económica o política de cualquier sujeto que se oponga a Estados Unidos, principalmente China y Rusia.
2.            Reemplazar los gobiernos independientes y fuera del control de Washington en Venezuela, Cuba, Nicaragua y Bolivia.
3.            Obstaculizar al máximo el proyecto del canal de Nicaragua. El canal de Panamá debe preservar el monopolio de Estados Unidos en el transporte directo entre el Caribe y el Océano Pacífico.
4.            Liquidar los efectos del “giro a la izquierda” y mantener la situación actual en países clave de América Latina para garantizar la continuidad a largo plazo del actual giro a la derecha, que se ve como algo necesario para promover los intereses de Estados Unidos.
5.            Eliminar la presencia militar china de Argentina y bloquear la cooperación técnico-militar de China y Rusia con los países de la región, lo que incluye garantizar los intereses de la industria militar estadounidense: por ejemplo, que Argentina compre armas estadounidenses, no chinas.
6.            Evitar una situación en la que territorios como Venezuela o Cuba puedan ser utilizados para el despliegue de bombarderos estratégicos o misiles con capacidad nuclear rusos, especialmente si se toma la decisión de desplegar nuevos misiles en el este de Europa.
7.            Conseguir el control sobre el petróleo de la Venezuela Bolivariana permitiría a Estados Unidos tener más influencia sobre el mercado y los precios y añadiría más presión a sus oponentes: China, Rusia e Irán.
8.            Garantizar los intereses de las multinacionales estadounidenses, que serían compensadas por los efectos de las nacionalizaciones del “giro a la izquierda” y reforzarían su dominio en América Latina.

Lograr con éxito estos objetivos desde el punto de vista de la “Doctrina Monroe 2.0, Amerika First” permitiría a Estados Unidos demostrar un éxito estratégico serio tras una serie de reveses en Eurasia y demostrar que, si bien su hegemonía se ha debilitado, no se puede hablar de que vaya a desaparecer en un futuro próximo.

De ahí la importancia de lo que está ocurriendo en Venezuela. La cuestión no es solo el cambio de régimen en un país, sino que es también una prueba a la capacidad de Estados Unidos de cambiar a su antojo los gobiernos en su “patio trasero” en el contexto de un debilitamiento de la influencia de Estados Unidos en el mundo.

Sí Estados Unidos tiene éxito, se puede esperar un aumento de la presión sobre Cuba y Nicaragua, e incluso intentos de aplicar el modelo de Venezuela en otras regiones en las que Estados Unidos pretenda lanzar una contraofensiva contra las posiciones de China y Rusia (en Eurasia y África).
La insistencia de China y Rusia en la cuestión venezolana no solo se trata de la defensa de Maduro y de Venezuela, sino de comprender un simple hecho: que lo que está ocurriendo en Venezuela, de una manera o de otra, tendrá implicaciones a nivel global tanto para América Latina como para la hegemonía global de Estados Unidos en general.

Lo subrayado es nuestro.

Repensar el papel de la Universidad en el siglo XXI.



Por Prof. Marcel Doubront.
Universidad Nacional Experimental Simón Rodríguez:

Evaluar el actual contexto social que vive el país desde la subjetividad, permite llegar a conclusiones inmediatas, encontrando culpables, señalando a supuestos opresores, apropiándose de la condición de oprimidos, es algo muy fácil, solo es suficiente analizar desde la zona de confort  o desde los intereses individuales, no obstante, los que creemos en la Pluriuniversidad como bien definiera Boa ventura de Sousa Santos “un conocimiento transdisciplinar que por su propia contextualización obliga a un diálogo o confrontación con otros tipos de conocimiento” entiéndase un conocimiento construido desde la interacción del saber científico y los saberes populares, estamos obligados a ver desde una posición compleja y no reduccionista, conociendo y comprendiendo el problema para plantear una alternativa.

La valoración del  presente histórico obliga a elegir una de dos opciones que están sobre la mesa, seguir buscando culpables o buscar una reflexión colectiva en relación a las consecuencias de la existente fragmentación como país del cual estamos inmersos, esto no trata de defender o señalar una postura política u otra, si bien es sabido que como sujetos políticos no somos neutrales, la ocasión amerita que a través de la diversidad y la libertad de pensamiento que nos abrogamos, intentar buscar desde la multidisciplinariedad la apertura a la descolonización del pensamiento como cimiento a la resolución de nuestros problemas como sociedad,  esa que nos hace llorar mientras que otros nos venden los pañuelos o como manifestara Darcy Ribeiro “Sólo hay dos opciones en esta vida: resignarse o indignarse.” sin embargo, sería muy injusto con las nuevas generaciones y las por venir que la universidad se resignara a los múltiples problemas que enfrenta cómo y en sociedad.

En ese orden de ideas, la Ley de Universidades en su Artículo 2. Refiere “Las Universidades son instituciones al servicio de la Nación y a ellas corresponde colaborar en la orientación de la vida del país mediante su contribución doctrinaria en el esclarecimiento de los problemas nacionales.” no obstante, ¿Qué podemos entender por nuestros problemas nacionales y que debemos hacer como universidad? en correspondencia con lo expuesto, Ivonne Farah en el libro La Universidad en el siglo XXI de Boaventura de Sousa Santos expresa:

Las transformaciones políticas que está viviendo el país han puesto a la universidad pública ante la necesidad de reflexionar sobre sí misma, sobre su lugar en la producción de interpretaciones culturales de la realidad, sobre su papel de mediadora cultural en las relaciones entre Estado y sociedad, y sobre la naturaleza de su carácter público.

Hoy la sociedad de acuerdo a su perfil, se divide en afirmaciones donde está situado la causa de nuestros problemas, afirmando tesis como vacíos en el área económica, política, jurídica, educativa, o moral, cada quien desde su óptica expone su visión y no buscar medios desde la multidisciplinariedad afín de que, desde la diversidad de los diferentes actores de la sociedad, poder encontrar una solución Transdisciplinaria, endógena y de pertinencia. Al respecto, el Maestro Simón Rodríguez – Maestro del General Libertador Simón Bolívar Palacios y Planco -,  oportunamente para este contexto expone, “Adquirir luces sociales significa rectificar las ideas inculcadas o mal formadas. Mediante el trato con la realidad en una conjugación inseparable de Pensar y Actuar bajo el conocimiento de los principios de independencia y generalización absoluta.”

En relación a lo expuesto, es necesario preguntarse ¿de dónde adquirimos esas ideas inculcadas o mal formadas? es oportuno señalar que a la educación no se le puede abrogar toda la responsabilidad de esas “ideas inculcadas o mal formadas” pero si puede ser culpable si no las contrarresta desde su praxis. En sinergia Boaventura de Sousa Santos refiere “La responsabilidad social de la universidad debe ser asumida por la universidad aceptando ser permeable a las demandas sociales, especialmente aquellas originadas en grupos sociales que no tienen el poder para imponerlas.” y no verlas como centros apolíticos neutrales y fragmentados de la realidad al respecto Ander Egg  refiere “el problema de la educación no puede ser considerado aisladamente del contexto político, social, económico y cultural en que se da”.

En virtud de lo expuesto, cabría la interrogante ¿Qué consonante es nuestra educación con el momento histórico? Afirmara el Maestro Libertador  José Martí Pérez, “El primer deber de una persona de estos días, es ser una persona de su tiempo.” pero, ¿Cómo coadyuvar a la creación de profesionales de su tiempo que a su vez sean mujeres y hombres de su tiempo? al respecto Zemelman refiere.

Si no estamos construyendo un pensamiento teórico porque no estamos comprendiendo los fenómenos de nuestras realidades, con toda su carga histórica y la propia historicidad del fenómeno ¿Cómo podemos formar a la gente joven?, ¿Cómo se puede formar a alguien, en el sentido de enseñarle a pensar?

Vivimos tiempos de mucha tensión, donde la educación universitaria  no puede ser indiferente,  los conocidos sectores en conflictos (Chavistas y Opositores)  no solo se abrogan la verdad sino que le endosan la responsabilidad de todos sus males a su adversario político o en un mejor término con quien discrepa de sus ideas y principios, en tal sentido, aunque se hable mucho de dialogo sería poco efectivo si el tema central de la reconciliación no es el proyecto país, en consonancia, Maturana afirma “Pienso que uno no puede reflexionar acerca de la educación sin hacerlo antes o simultáneamente acerca de esta cosa tan fundamental en el vivir cotidiano como es el proyecto de país en el cual están inmersas nuestras reflexiones sobre educación.”

Esta afirmación también es compartida por Boaventura de Sousa Santos cuando refiere que “La universidad pública sabe que sin proyecto nacional sólo hay contextos globales y estos son demasiado poderosos para que la crítica universitaria de los contextos no acarree la propia descontextualización de la universidad.” En correspondencia, es importante tener presente que la educación debe ser concebida por un proyecto país afín de tener una educación de pertinencia con profesionales comprometidos al desarrollo local, regional y nacional.
De igual manera ese proyecto país debe estar en sinergia (y viceversa) a los planes educativos que se desarrollan ya que de estas casas de estudios no solo se formaran los profesionales que impulsaran el desarrollo de la nación sino que de estas se deben realizar las investigaciones y proyectos más oportunos para los desafíos del presente y futuro que afronta el país,  en ese sentido, la Ley de Universidades  en su Artículo 3.

La función fundamental de la Universidad es “Unir” la luz con el sudor.

Las Universidades deben realizar una función rectora en la educación, la cultura y la ciencia. Para cumplir esta misión, sus actividades se dirigirán a crear, asimilar y difundir el saber mediante la investigación y la enseñanza; a completarla formación integral iniciada en los ciclos educacionales anteriores, y a formar los equipos profesionales y técnicos que necesita la Nación para su desarrollo y progreso.

En el 2017 el actual Ministro de educación Universitaria Hugbel Roa hablaba sobre la necesidad de “la ciencia al servicio de la realización del ser humano y no del capital” así como  “La Universidad comprometida con la solución de los problemas del país.” preguntándose además “¿qué ha faltado para que esta visión se imponga y en consecuencia se traduzca en beneficios directos y concretos para el pueblo en la medida que la Universidad se incorpore a la sociedad con la fuerza y potencialidad que debe tener para la solución de los problemas. ¿Una política científica nacional que estimule la solución para nuestra realidad, desde las universidades?”.
En razón de ello, el  sistema educativo no puede estar desconectado de esa responsabilidad, sería de muy mala fe, exigir que otros asuman la responsabilidad que puede y que debe ocupar un contexto educativo de coherencia y pertinencia, pero si el plan donde están inmerso los pensum y la praxis educativa consiste en solo graduar profesionales para el desarrollo personal del educando y no como una visión prospectiva desde un proyecto país, estamos jodidos, en tal sentido, cabría preguntarse ¿hay una necesidad de forjar una educación que no solo se traduzca en tener quien sepa sino garantizar tener quien haga? Boaventura de Sousa Santos expresa “Los desarrollos de la última década ponen desafíos mucho más exigentes a las universidades y específicamente a la universidad pública”.

Para ello, debe existir una estrecha sinergia entre el conocimiento y la conciencia afín de que la educación sea no solo un proceso de formación sino de transformación intelectual pero también moral y humana,  en correspondencia el Maestro  Simón Rodríguez también refería “Enseñar es hacer comprender; es emplear el entendimiento; no hacer trabajar la memoria" de conformidad con lo expuesto,  Freire expone que  “La educación verdadera es praxis, reflexión y acción de la persona – mujer y hombre -, sobre el mundo para transformarlo.” Si la misión de educar no está cargada de una mirada prospectiva a la sociedad necesaria citando nuevamente a Robinson “nunca se hará republica con gente ignorante, sea cual fuere el plan que se adopte”.
Hoy el subsistema universitario afronta  grandes problemas de deserción, desinterés, bajo rendimiento estudiantil, disminución de la calidad académica, etc., mucho pueden atribuir  asertivamente que el motivo a los problemas mencionados a la crisis económica, infraestructura universitaria, carencia de condiciones logísticas y tecnológicas, etc., no obstante, tampoco estaría alejada de la realidad que hoy la educación universitaria está hablando un idioma totalmente antagónico a las expectativas de sus educandos o como refiriera Gutiérrez “La escuela que nació como mediadora entre la persona y las necesidades sociales, hoy está jugando el papel narcisista de ser fin en sí misma, Ha creado su propio medio, su entorno y hasta su lenguaje.”  Por ello, son oportunas las palabras del Maestro Simón Rodríguez cuando refiere, “No hay interés donde no se estribé el fin de la acción. Lo que no se hace sentir no se entiende, y lo que no se entiende no interesa. Llamar, captar y fijar la atención, son las tres partes del arte de enseñar. Y no todos los maestros sobresalen en las tres.”
Si la universidad no es coadyuvante de la construcción de la nueva ontología del educando, sino existe la fusión de conocimiento y conciencia, si el plan que se adopta es una imposición y no una visión de desarrollo intelectual, moral, humanístico, colectivo, de patria, un cimiento de libertad, si este no es multi y transdisciplinario, todo ese esfuerzo no solo será insuficiente sino infecundo (parafraseando al manifiesto de Córdoba de 1918). En razón de ello, buscar una transformación Universitaria que trascienda de lo tradicional a lo Robinsoniano, pasa como refiriera Rigoberto Lanz pasa por.
Entender las transformaciones universitarias como un proceso de cambio paradigmático en todos sus ámbitos, es decir, como una reforma del pensamiento, es la condición de posibilidad de transitar un camino de refundación del papel de la educación en esta nueva era planetaria; Mariategui lo había alertado cuando hacía referencia sobre “La docencia secundaria y universitaria, tanto por su función como por su estructura, tiende a crear una burocracia conservadora.”  En otras palabras, una intelectualidad que sabe mucho pero comprende poco, pero mucho peor intenta imponer sus dogmas mediante la instrucción y no la facilitación de herramientas para construir el conocimiento, en  esa necesidad evolución al siglo XXI de nuestras universidades, pasa por el entendimiento  de lo que refiriera el Maestro Simón Rodríguez  en una época muy cónsona a la nuestra  “Hoy se piensa, como nunca se había pensado, se oyen cosas  que nunca se habían oído,  se escribe  como nunca se había escrito y esto va formando opinión en favor de una reforma, que nunca se había intentado”.
En correspondencia con lo citado Ortega y Gasset hace referencia “Todo movimiento de reforma reducido a corregir los chabacanos abusos que se cometen en nuestra universidad llevara indefectiblemente a una reforma también chabacana” Si no se tiene claro que es lo que se necesita, si se desconoce o no hay un concierto  de nuestras universidades con el proyecto país  o mucho peor, ante la actual situación si la universidad no está a la altura de presentar planes que permitan fortalecer un proyecto país, muy insignificante es lo que se puede lograr de acuerdo a la dicotomía entre el momento histórico, la necesidad histórica y las acciones  que se emprenden.

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