Francia: abajo el decreto de pensiones de Macron
MIGUEL LAMAS | UIT-CI
La
movilización realizada el 7 de marzo fue la sexta y más grande de las masivas
protestas contra la reforma de la ley de pensiones que intenta
el presidente Emmanuel Macron. El
sábado 11 hubo otra marcha nacional. Además, varios sectores claves
anunciaron el comienzo de “huelgas prorrogables” (es decir se mantendrían en
huelga continua decidida por asambleas). Pese a esto, el Senado
aprobó la reforma y anunciaron que se aprobará en diputados esta semana.
La
movilización del martes 7 de marzo, convocada por ocho centrales sindicales,
fue de 1,28 millones de personas, según el gobierno, y de 3,5 millones según la
central sindical CGT (700 mil sólo en París). Es la mayor protesta en tres
décadas. Y es superior a la del 31 de enero, cuando se movilizaron 2,8
millones.
Al término
de la jornada, el frente sindical pidió a Macron una reunión
“urgente”, porque su “silencio ya no es posible”. Pero no sólo se negó a la
reunión, sino que la propuesta de ley fue aprobada en el Senado.
Varios
sectores claves, como las refinerías, los ferrocarriles y el sector energético,
resolvieron las huelgas prorrogables.
La basura
se acumulaba en las calles de París y se bloquearon las entregas de combustible
de las refinerías porque estos continuaban con las huelgas contra la reforma
jubilatoria. También se interrumpió el suministro eléctrico y se retrasó el
mantenimiento de algunos reactores nucleares.
Otra
muestra de la voluntad desde las bases de radicalizar las medidas, es que se
organizaron piquetes y bloqueos de carreteras en muchos lugares del país.
Los
sindicatos también apoyaron las manifestaciones convocadas para el miércoles 8
con motivo del Día Internacional de la Mujer y el jueves 9, llamado por los
estudiantes, que se están movilizando en toda Francia.
Lo
intentan desde hace muchos años
La reforma
de la ley de pensiones no es sólo el aumento de la edad jubilatoria de 62 a 64
años, sino que cambia las condiciones y exige un mínimo de 43 años de aportes
en momentos en que cada vez más jóvenes no tienen trabajos regulares. Dos de
cada tres franceses, según todos los sondeos, se oponen a esta reforma.
El ataque
al sistema de pensiones es una exigencia de los capitalistas franceses desde
hace décadas antes de Macron. El primer intento serio de la burguesía francesa
de rebajar a las jubilaciones fue en 1995 con el infame “Plan Juppé”, derrotado
por el movimiento de masas más importante sucedido en Francia desde mayo de 1968.
Es
evidente que en lo inmediato, para derrotar al gobierno y sus planes, “lo
primero” es que habrá que preparar un plan de lucha endureciendo
cualitativamente las medidas
El actual
presidente Macron también lo intentó 2019-2020, provocando la oleada de huelgas
más grande de las dos últimas décadas, incluyendo el movimiento casi
insurreccional de los “chalecos amarillos” y una huelga ferroviaria de seis
meses de duración que obligaron a su gobierno a retirar el plan de reforma de
las pensiones cuando este ya había sido aprobado por el Parlamento.
Ahora
todo está peor con la crisis capitalista
Y hoy en
Francia el gobierno sigue diciendo que va a aplicar sí o sí la reforma de
pensiones.
Para los
trabajadores, las pensiones tampoco son el único problema que empeoró su
situación. El tema salarial, ante los aumentos de precios de energía y
alimentos, es también un reclamo central. Aunque los dirigentes burocráticos de
las centrales sindicales no lo están tomando con el argumento de que “lo
primero” es que se retire la reforma de pensiones.
Es la
economía capitalista agonizante en su conjunto, en Francia y en el
mundo, la que está tratando de hacer pagar su peor crisis a las y los
trabajadores.
La
necesidad de un plan de lucha
Si bien
las ocho centrales sindicales se han unido y también con el movimiento
estudiantil, las direcciones sindicales burocráticas siguen sin profundizar las
medidas con un plan de lucha, mientras intentan negociar con Macron, que se
niega públicamente a toda negociación.
Esto
plantea también la necesidad de que, al calor de esa gran lucha, trabajadores,
trabajadoras y jóvenes se organicen en la perspectiva de conformar una
alternativa socialista revolucionaria por un cambio de fondo que termine con
esta catástrofe capitalista, por una alternativa política para terminar
con el gobierno de Macron, hacia un gobierno del pueblo trabajador.
Es la
economía capitalista en su conjunto, en Francia y en el mundo, la que está
tratando de hacer pagar su peor crisis a las y los trabajadores
Es
evidente que en lo inmediato, para derrotar al gobierno y sus planes, “lo
primero” es que habrá que preparar un plan de lucha endureciendo
cualitativamente las medidas, como lo plantean sectores de base con las huelgas
(“reconducible”) que ya están realizando del conjunto del país y también los
bloqueos. Y para eso incorporar al conjunto de los trabajadores, trabajadoras y
jóvenes, con sus demandas, incluyendo la salarial y plenos derechos laborales,
por un plan económico del pueblo trabajador.
Desde la
UIT-CI damos todo el apoyo a esta grandiosa lucha del pueblo trabajador
francés.
Francia, bajo el decreto de pensiones de Macron: “La multitud no
tiene legitimidad”.
Por Miguel Lamas, Miembro de la dirección UIT-CI.
¿De qué legitimidad, según la política bajuna del sistema capitalista salvaje habla este tartufo testaferro?.
“Bajo el sistema capitalista salvaje no hay destino viable para la Humanidad”. Dr. Karl Marx.
Estimados amigos asociados:
Reitero una vez más la genial
reflexión del compañero Presidente Dr. Salvador Allende Gossens: “Un pueblo sin memoria histórica nada
significa ni nada vale”. En el contexto de ella, les recuerdo a los faltos
de memoria histórica que un 5/5/1789, el Movimiento Social Popular Revolucionario del
soberano Pueblo francés, dijo ¡Basta!, con las banderas de la Libertad,
Igualdad, Fraternidad y la “cuestión social”, derrocó y terminó con el sistema
monárquico feudal absolutista francés inepto, sibarita….
“La cuestión social”
concierne a la oportuna regulación del trabajo y de las condiciones de los
trabajadores y puede definirse como el conjunto de males que en el siglo XVII y ahora reinan en la
sociedad capitalista respecto al trabajo, de los cuales conociendo las causas
aplicar soluciones de fondo. La existencia del mal, el caos social, la catástrofe
del sistema capitalista – para sus
epígonos testaferros la denominan “crisis”, una anomalía semántica -, con la
consciencia que se tiene de él, proceder en consecuencia operando el cáncer.
Para los mercachifles dueños
de la celestina universal- financistas del sistema monárquico y de todos los
regímenes burgueses -, éste mal, “la cuestión social” no existe. Su testaferra,
la clase burguesa/liberal los apoya.
Ella existe solo en el cerebro
exaltado de alborotadores, caóticos de algún estallido social o revuelta sin
importancia.
¡Viva la libertad somos
libres, viva el liberalismo, dejar hacer dejar pasar¡. Se afianzó la
burguesía liberal controlando la asamblea legislativa constituyente,
muere la monarquía feudal absolutista y aparece viva y coleando la clase de
mercachifles financiera, agrícola terrateniente, para seguir
manejando los destinos del género humano.
La burguesía liberal
vencedora aplicó al orden económico, el programa individualístico y atomístico.
Toda sombra de concepción orgánica de la
vida social desparece. Se prohibió cualquier forma de asociación de
trabajadores. Ver el decreto de Turgot aprobado por la reaccionaria asamblea el
14/7/1791.
¿Qué nos queda de la causa
noble y justa del Movimiento Social, Popular Revolucionario del soberano Pueblo
Francés? La toma de la Bastilla y las banderas de la libertad, igualdad y
fraternidad transformada en estereotipos
chovinistas patrioteros de la clase
oligarca empresarial, financiera –bancaria/agiotista, agrícola
monopolista y de su testaferra clase burguesa politicastra/castrense
corrupta. “La Cuestión social” no existe
para estas lacras ocupantes del territorio del soberano Pueblo Francés. Pero,
vigente hasta nuestros días. Quien puede dudarlo viendo hoy, al querido, libre
y soberano Pueblo Francés y sus vanguardias la Clase Trabajadora y la Juventud
luchando en las calles de Francia para resolver de una vez “la cuestión
social”. Los ocupantes de Francia, la oligarquía empresarial y su testaferra la
clase burguesa liberal impusieron una libertad, una democracia y una justicia
en la medida de lo posible que las rechazo, porque no existe el ser humano en
la medida de lo posible…
En el contexto de la
discusión bizantina, en la asamblea legislativa constituyente reaccionaria
controlada por la clase burguesa/liberal traidora, los genios pensantes del
Movimiento Social Popular Revolucionario Juan Jacobo Rousseau y Voltaire son
frivolizados y sus luchadores consecuentes Robespierre, Danton, Marat, etc.
Caen luchando, asesinados por la causa prometeica, “el Ser Humano elevándose de la vida finita a la vida infinita…”
En el contexto de la traición
de la clase burguesa/liberal antes señalada, ésta impone por orden de su patrón
oligarca reinante, el 1%, la propiedad privada que propugna el derecho del
propietario/empresario para usar y abusar de ella a su antojo. El trabajo es
una mercancía sometida a “la ley de la oferta y de la demanda”. Enemiga de la estatización y de la
legislación social contraria a las huelgas, etc. La historia de la Humanidad es
la historia de la lucha de clases. Los
empresarios y financistas/bancarios/agiotista terratenientes agrícolas dueños
de la celestina universal, el 1% dominan, explotan y enajenan a la mayoría el
género humano y la condenará a la servidumbre. La libertad, la democracia y la
justicia en la medida de lo posible de los empresarios apátridas oligarcas
sibaritas dependen el mantenimiento de sus privilegios y del hambre,
explotación y enajenación del género humano.
La Democracia mayoritaria del
pueblo del pueblo y para el pueblo soberano ha sido una ficción, un espejismo
como todas las abstracciones que pueblan la fantasía de los ingenuos y forman
el capital de los mendaces, el Pueblo soberano siempre ha estado ausente,
marginado…
Con esperanza y memoria, la
hora del sistema capitalista salvaje agonizante está llegando, no lo salvaran
las malditas guerras imperiales, las pandemias, el narcotráfico, el hambre, la
miseria, la bancarrota del sistema financiero/bancario/ agiotista, etc. Con una segunda y gloriosa aurora del
Movimiento Social, Popular del libertario, digno y soberano Pueblo Francés,
que logrará zanjar el dilema aún no resuelto, “socialismo marxista o barbarie
capitalista “, sin caminos intermedios, atajos sin salida de los oportunistas
testaferros, socialdemócratas, y demócratas cristianos, para terminar con la
tiranía capitalista la más despótica, perversa, desalmada e inmoral que la
historia de la humanidad haya conocido, y alcanzar la felicidad del género
humano.
Prof. Moreno Peralta/IWA
Secretario ejecutivo Addhee.Ong
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