sábado, 11 de marzo de 2023

ESTADOS UNIDOS/Occidente/Union Europea/OTAN, RUSIA, UCRANIA


ESTADOS UNIDOS/Occidente/Union Europea/OTAN, RUSIAUCRANIA.


“La Guerra ó la Paz en Ucrania”:
“Si quieres la paz prepárate para la guerra”.

Marcelo Solervicens. 

Escritor, Periodista, analista internacional

¿La guerra o la paz en Ucrania? Debería normalmente darse una chance a la paz pero ocurre todo lo contrario. Después del primer aniversario se afirma la continuidad de la tragedia ucraniana extendiendo a nivel internacional un conflicto regional que ya escaló con la invasión rusa del 24 de febrero de 2022.

El aniversario de la invasión rusa a Ucrania estuvo marcado por la retórica guerrera de los países involucrados. El presidente ruso Vladimir Putin explica su Operación Militar Especial (OME) en apoyo a las repúblicas populares separatistas del Dombás bombardeadas por el gobierno neonazi de Kiev.

También justifica la continuidad de la guerra por la necesidad de defenderse ante el proyecto “Anti-Rusia” de occidente/USA/UE/OTAN que busca la derrota estratégica de Rusia mediante un frente militar, económico e informativo. Plantea en respuesta la suspensión del Tratado New START.

Por su parte el gobierno ucraniano dirigido por Volodymyr Zelensky celebra el año de la invencibilidad y promete una victoria inevitable gracias al apoyo armado de occidente, si occidente sigue apoyando con armas a Ucrania.

El presidente estadounidense Joe Biden promete que la coalición que encabeza seguirá armando a Ucrania, pero escala el conflicto  interpretándolo como parte de un combate mundial entre autocracia y democracia, en una lógica de nueva guerra fría, para fortalecer su país ante el creciente cuestionamiento de la hegemonía de EE.UU. en el mundo/Nuevo orden mundial según las piedras guías de Georgia/USA..

Además, en la Conferencia de seguridad de Múnich (CSM), la Unión Europea y los países miembros de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN),  incluido el B-9 confirmaron la estrategia de que para lograr la paz y la seguridad en Europa deben asegurarse de que Ucrania sea capaz de derrotar a Rusia; apoyándola con armamentos y rompiendo lazos económicos con el Kremlin.[1]

Es así como, las raíces históricas de un conflicto de  larga gestación, se vuelven cada vez más nebulosas y lo más sensato sería optar por la diplomacia y un acuerdo de paz que detenga la tragedia ucraniana. Lo cierto es que la guerra de la comunicación crea una situación fluida, pletórica de desinformación y dominada por la propaganda de ambos bandos en la óptica de “buenos” y “malos”.

Ni siquiera existe un conteo de las víctimas. Cada campo calcula la del adversario como índice de victoria y le acusa de atrocidades. En diciembre pasado, la cadena alemana DW afirmaba que ambos bandos guardan bajo secreto su número de soldados muertos y heridos. Ni siquiera hay fuentes creíbles sobre el número de víctimas civiles. En noviembre pasado, el ejército de EE.UU., calculaba que sumaban 240 mil muertos, entre ellos, unos 40 mil civiles (BBC). Por su parte la ONU confirmaba en enero solo la muerte de al menos 6.919 civiles.

Mientras tanto, sigue la tragedia ucraniana sin perspectivas de cese al fuego y búsqueda de una resolución del conflicto. Con la carrera armamentista gana el complejo industrial militar. Con la ruptura de relaciones económicas, salen beneficiadas las compañías petroleras estadounidenses que son las que suministran ahora los países europeos. Europa se vio obligada a reabrir centrales de carbón, afectando los planes de descarbonización contra la crisis climática (Negocios).[2]

Probando que el mundo va cambiando, las posibilidades de mediación diplomática para la resolución pacífica del conflicto surgen de los llamados países emergentes y del llamado Sur Global. Washington rechazó la propuesta de la República Popular China. Pekín propone un acuerdo de paz con los criterios que se aplican generalmente en este tipo de conflictos: el reconocimiento, tanto de la integridad territorial de Ucrania, como responder a la necesidad de dar garantías de seguridad a Rusia.

«LA ORGANIZACIÓN DE LAS NACIONES UNIDAS (ONU) CREADA, SEGÚN SUS FUNDADORES, PARA EVITAR A LAS GENERACIONES VENIDERAS EL FLAGELO DE LA GUERRA, APARECE INCAPAZ DE ASUMIR ESE ROL ANTE EL CONFLICTO UCRANIANO. ¿EL SISTEMA INTERNACIONAL NO TIENE INSTITUCIONES QUE APOYEN UN PROCESO DE PAZ? EL FUTURO DE LA GUERRA O DE LA PAZ EN UCRANIA DEPENDE, NO DE UNA CARRERA ARMAMENTISTA, SINO DE LA INSTALACIÓN DE UN PROCESO DE RESOLUCIÓN PACÍFICA DEL CONFLICTO.»

Los BRICS, desde Brasil hasta India, se ofrecen como mediadores. Se suman varios países del sur Global, otrora considerados “subdesarrollados”, que pese a condenar la guerra son reacios a apoyar con armas una escalada guerrera que arriesga con reeditar las tragedias del siglo XX en lugar de obtener la paz (Swissinfo).[3]

Por su parte, la Organización de las Naciones Unidas (ONU) creada, según sus fundadores, para evitar a las generaciones venideras el flagelo de la guerra, aparece incapaz de asumir ese rol ante el conflicto ucraniano.[4] ¿El sistema internacional no tiene instituciones que apoyen un proceso de paz? El futuro de la guerra o de la paz en Ucrania depende, no de una carrera armamentista sino de la instalación de un proceso de resolución pacífica del conflicto.

Simón Tisdall del The Guardian, afirma con optimismo que la postura de Washington no fructificará: la extrapolación del conflicto ucraniano a una cruzada mundial contra todos quienes se opongan al modelo occidental de democracia va contra la mitad del mundo. Recuerda la lógica maniquea de Bush en 2001.[5] La propuesta del presidente Joe Biden es preocupante y a la inversa de lo que se requiere.

En un contexto de crisis de la globalización, de la hegemonía occidental y del fortalecimiento del multilateralismo, la guerra en Ucrania debe conservar un carácter regional y aplicarse las fórmulas consagradas de resolución de conflictos. Lo contrario es abrir una caja de Pandora.

Discurso de Vladimir Putin en Vísperas del aniversario de su OME

En vísperas del primer aniversario de la guerra en Ucrania, los discursos, del presidente ruso Vladimir Putin; unas horas más tarde, del presidente estadounidense Joe Biden desde Kiev, confirmaron la escalada guerrera y los intentos de transformar el conflicto en un marco mundial.

El presidente ruso Vladimir Putin en su discurso anual ante el Congreso de la Federación Rusa, y en vísperas de aniversario de la invasión rusa en Ucrania, con la llamada Operación Militar Especial (OME), reafirmó que va a asegurar la liberación de las “tierras históricas” de Rusia contra la amenaza del régimen neonazi instalado tras el golpe de Estado de 2014 en Ucrania ( Ver la transcripción del discurso en Diario16).[6].

La justificación principal de la invasión rusa radica, según diversos analistas, en que el gobierno ruso considera Ucrania como su tradicional zona de influencia por geografía, cultura e historia (Varsavsky, J. 2023).[7] A ello se agrega el repudio de Moscú del golpe de Estado de 2014, contra el presidente prorruso Viktor Yanukóvich, en el marco de una estrategia de cambio de régimen expresada en el apoyo occidental a las movilizaciones del llamado Euromaidan proeuropeo. (Mearsheimer, J. 2014).[8]

El recrudecimiento del conflicto entre los calificados como separatistas prorrusos del Dombás y los nacionalistas ucranianos llevó a la adopción de una serie de acuerdos que no fueron respetados (BBC).[9] El presidente ruso denunció los subsiguientes bombardeos y ataques contra el Dombás desde la creación por referendo de las repúblicas populares de Donetsk y de Lugansk en abril y mayo de 2014 respectivamente. (ElEconomista).[10]

Putin afirma que fue en reacción al Golpe de Estado e 2014, que inclinaba Ucrania hacia su identidad europea, que Rusia optó, luego de un referendo en marzo de 2014, por aceptar la anexión de la Crimea a la Federación Rusa (EOM).[11] Desde entonces Putin calificó a Kiev como un gobierno neonazi. Apoyó esa versión por la incorporación a las fuerzas armadas ucranianas regulares de milicias ultranacionalistas, entre ellas, la del regimiento Azov, derrotado en Mariúpol en 2021.[12]

«LA JUSTIFICACIÓN PRINCIPAL DE LA INVASIÓN RUSA RADICA, SEGÚN DIVERSOS ANALISTAS, EN QUE EL GOBIERNO RUSO CONSIDERA UCRANIA COMO SU TRADICIONAL ZONA DE INFLUENCIA POR GEOGRAFÍA, CULTURA E HISTORIA. A ELLO SE AGREGA EL REPUDIO DE MOSCÚ DEL GOLPE DE ESTADO DE 2014, CONTRA EL PRESIDENTE PRORRUSO VIKTOR YANUKÓVICH, EN EL MARCO DE UNA ESTRATEGIA DE CAMBIO DE RÉGIMEN EXPRESADA EN EL APOYO OCCIDENTAL A LAS MOVILIZACIONES DEL LLAMADO EUROMAIDAN PROEUROPEO.»

En su largo discurso, el presidente ruso denunció las mentiras y jugadas de occidente para crear un frente militar, informativo y económico que busca “la derrota estratégica de Rusia”. El presidente ruso comparó la intervención occidental en la guerra en Ucrania con la experiencia destructiva de Yugoslavia, Irak, Libia y Siria. Como en otras oportunidades y desde un discurso conservador con ribetes mesiánicos, Putin culpó a las élites occidentales por incitar y desencadenar la guerra con un objetivo “anti-Rusia”, acompañado por la expansión de la OTAN desde los años noventa.

El Kremlin aduce tradicionalmente a la traición de occidente, al no cumplir la promesa que habría hecho el secretario de Estado de EÉ.UU., James Baker a Mikhail Gorbachov en 1990, de no expandir la OTAN si la Alemania unificada permanecía en ella (Swissinfo).[13]

En esa perspectiva, fue una justificación clave del lanzamiento de su Misión Militar Especial (OME), el que occidente no acogiera su exigencia, de diciembre de 2021, de garantías de seguridad de que la OTAN no se instalará en su frontera (ElPaís).[14] Alfred de Zayas, destaca efectivamente, que ya en 2007 ante la Conferencia de Seguridad de Múnich (CSM), Putin había advertido de las consecuencias de la expansión de la OTAN hacia su frontera.[15]

Reafirmando su retórica guerrera, el presidente ruso Vladimir Putin, afirmó que a la OTAN le será “imposible derrotar a Rusia en el campo de batalla”. Anunció al mismo tiempo la suspensión de la participación de Rusia en el acuerdo estratégico New START firmado en 2010 con Barack Obama y que limita a 1550 las ojivas nucleares (France24).[16] Un acuerdo moribundo por acusaciones mutuas de no facilitar las inspecciones. La justificación de Putin, para ese gesto agresivo es que el tratado no incluye potencias nucleares que participan en la OTAN, como el Reino Unido y Francia, las que perfeccionan, modernizan y apuntan sus arsenales nucleares contra Rusia (Echegaray).[17]

El presidente Vladimir Putin insistió en entrevista el 26 de febrero de 2023, en que la guerra en Ucrania es una reacción defensiva obligada de Rusia ante una estrategia de Washington que busca, desde el colapso de la URSS, reformular el mundo exclusivamente en sus propios intereses, esencialmente, busca desmantelar la Federación Rusa (The Guardian).[18]


 

El discurso de Ucrania, la OTAN, Unión Europea y Estados Unidos

Por el lado del gobierno de Ucrania, de los principales países europeos y de Washington, tampoco existe interés por una solución negociada y pacífica del conflicto.

El presidente ucraniano Volodymyr Zelensky calificó el primer año de guerra como el de la invencibilidad de Ucrania y afirmó que 2023 será el año de su victoria ineludible: Prometió que “Ucrania vencerá” este año” con el apoyo en armamaneto de sus aliados (RFI).[19]

Una percepción generalizada en occidente es que Ucrania ha demostrado que puede derrotar a Rusia si se le apoya con armamento (CNN).[20] El gobierno ucraniano, liberal/naconalista y proeuropeo dirigido por Volodymyr Zelensky, ha incrementado constantemente sus demandas de municiones, tanques y hasta aviones caza, a los países de la OTAN. El apoyo en armamento, sería la condición que permitiría asegurar la victoria final de Ucrania contra el ejército ruso a fines de 2023 recuperando todos los territorios conquistados por el ejército ruso, incluida Crimea. (DW).[21]

En la reciente 59ª Conferencia de Seguridad de Múnich (CSM),  Zelensky reiteró que no había alternativas a la victoria de Ucrania, a su entrada en la Unión Europea y en la OTAN (Infobae).[22] En esa conferencia, los países europeos dijeron adiós al pacifismo y prometieron acelerar la entrega de armamento para que Ucrania se defienda de Rusia (ElDebate).[23] Ven como única solución del conflicto, incluidos ahora los gobiernos de Francia y Alemania, el retiro incondicional de las tropas rusas de Ucrania, incluido el Dombás y Crimea y sin que se le den garantías de seguridad a Moscú. Decidieron escalar el conflicto aunque varios, como Alemania, dudan que termine en 2023.

Esta vez, la CSM excluyó a la Federación Rusa. Ella sirvió para reforzar la estrategia militarista de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) de la Unión Europea (UE), y de Washington, sin visos de proponer una solución negociada y acuerdos de paz. Una escalada militarista que se traduce en la exigencia de parte del jefe de la OTAN, Jens Stoltenberg, de aumentar al menos 2% del PIB a gastos militares de sus países miembros a más tardar en 2024.[24]

«EN LA 59ª CONFERENCIA DE SEGURIDAD DE MÚNICH (CSM),  ZELENSKY REITERÓ QUE NO HABÍA ALTERNATIVAS A LA VICTORIA DE UCRANIA, A SU ENTRADA EN LA UNIÓN EUROPEA Y EN LA OTAN. EN ESA CONFERENCIA, LOS PAÍSES EUROPEOS DIJERON ADIÓS AL PACIFISMO Y PROMETIERON ACELERAR LA ENTREGA DE ARMAMENTO PARA QUE UCRANIA SE DEFIENDA DE RUSIA. VEN COMO ÚNICA SOLUCIÓN DEL CONFLICTO, INCLUIDOS AHORA LOS GOBIERNOS DE FRANCIA Y ALEMANIA, ES EL RETIRO INCONDICIONAL DE LAS TROPAS RUSAS DE UCRANIA, INCLUIDO EL DOMBÁS Y CRIMEA Y SIN QUE SE LE DEN GARANTÍAS DE SEGURIDAD A MOSCÚ.»

Una escalada que beneficia al llamado complejo militar industrial principalmente de EE.UU. de acuerdo a OCIPEX.[25] Resucita la guerra fría (El Independiente).[26] Una estrategia inexplicable de retorno a una guerra fría: se suponía que el desplome del llamado bloque soviético la había dejado definitivamente en el pasado.

La Conferencia de la Seguridad de Múnich y la escalada guerrera de los gobiernos involucrados fue el blanco de protestas de la sociedad civil alemana y europea, contra los belicistas. Las movilizaciones fueron desoídas por los grandes medios de comunicación.[5] Es evidente, de acuerdo a movimientos pacifistas y algunos partidos europeos, como el Podemos español, [27]  que las decisiones de la CSM y la OTAN favorecen una carrera armamentista que aumenta la inseguridad.

Chiba, “Esta guerra no puede continuar”.

Paradojalmente, en contrapunto, fue en la misma CSM que el representante de la República Popular China, Wang Yi afirmó que “esta guerra no puede continuar”: afirmó que Pekín está comprometido con la paz (Público).[28] Es así como propuso negociaciones para asegurar la integridad territorial para Ucrania y garantías de seguridad para Rusia (El Correo). Una propuesta que cayó en oídos sordos y causó desconfianza en Ucrania.[29]  La República Popular China afirma que busca la paz mientras occidente solo alimenta el fuego (Yang Shen).[30] Que esa debería ser la estrategia de la mal llamada comunidad internacional/occidente.

China: “Para USA su principal adversario”

Lo cierto es que el Secretario de Estado Anthony Blinken de E.E.UU., contraatacó denunciando que la República Popular China planeaba apoyar con armas a Rusia.[31]  Una estrategia comunicacional que hace oídos sordos al desmentido del gobierno Chino. Eso recuerda que Washington considera que la República Popular China es su principal adversario. Más que Rusia. En sus esfuerzos por mantener a toda costa su hegemonía mundial, le conviene a EE.UU. hacer una amalgama entre Moscú y Pekín.[32]

Joe Biden: una guerra entre democracia y autocracia

El presidente de Estados Unidos de América Joe Biden, en sorpresiva visita a Kiev, el lunes 20 de febrero de 2023, confirmó su apoyo indefectible a Ucrania. Reafirmó que las fuerzas y el ejército ruso han cometido atrocidades, crímenes contra la Humanidad, sin vergüenza. En respuesta al discurso de Vladimir Putin, Joe Biden reafirmó la política estadounidense de apoyo con armas a Ucrania (ver la transcripción del discurso completo en Diario16).[33]

Buscando erigirse en defensor del mundo libre, como en tiempos de la guerra contra el comunismo, Joe Biden planteó que Washington defenderá la soberanía ucraniana, su derecho a vivir libre de agresiones y la democracia. Afirmó que EE.UU. está por “Una Ucrania que sea libre, democrática, soberana.”, como sus colonos mentales de la UE, el patio trasero, etc.

Destacó la importancia de la OTAN “la alianza más fuerte de la historia.” Confirmó el apoyo inquebrantable a Ucrania, la OTAN no se va a dividir y no se van a cansar. Destacó que en lugar de conseguir la victoria fácil, Putin llevó sus fuerzas al desarraigo. Consiguió unificar la OTAN que sería más fuerte que nunca. Porque ahora se agregan ahora Suecia y Finlandia.

En efecto de contar con 12 miembros fundadores en 1949; con 16 en el momento del desplome del Pacto de Varsovia soviético, la OTAN cuenta ahora con 30 miembros. Destaca la entrada en 1999, en 2004 y 2009 de países del ex bloque soviético.[34]

Destacó Biden, la dimensión económica de la intervención occidental en Ucrania, ligada a obtener que Europa sea independiente de los combustibles fósiles de Rusia. Que a pesar de la invasión rusa, Ucrania sigue siendo independiente y libre. Destacó que los ucranianos han recuperado el 50% del territorio que tenían los rusos el año pasado.

«EL PRESIDENTE DE EE.UU. JOE BIDEN REITERÓ EN SU DISCURSO EN VARSOVIA QUE EL CONFLICTO EN UCRANIA ES UNA BATALLA ENTRE DEMOCRACIA Y AUTOCRACIA. AFIRMÓ QUE “PUTIN ESTÁ INTENTANDO MATAR AL MUNDO DE HAMBRE, BLOQUEANDO LA EXPORTACIÓN DE GRANO DESDE EL MAR NEGRO”, CREANDO CRISIS ALIMENTARIA EN ÁFRICA. PLANTEÓ QUE EL  MUNDO ESTÁ EN UN PUNTO DE INFLEXIÓN ENTRE EL CAOS Y LO ETERNO. ENTRE CONSTRUIR Y DESTRUIR. ENTRE LA ESPERANZA Y EL MIEDO. “ENTRE UNA DEMOCRACIA QUE AUMENTA EL ESPÍRITU HUMANO Y LA BRUTALIDAD DE UN DICTADOR QUE LA QUIERE APLASTAR”.

Retomando un discurso maniqueo entre el bien y el mal. El presidente de EE.UU. Joe Biden reiteró en su discurso en Varsovia que el conflicto en Ucrania es una batalla entre democracia y autocracia (Infobae).[35] Afirmó que “Putin está intentando matar al mundo de hambre, bloqueando la exportación de grano desde el mar negro” creando crisis alimentaria en África. Planteó que el  mundo está en un punto de inflexión entre el caos y lo eterno. Entre construir y destruir. Entre la esperanza y el miedo. “Entre una democracia que aumenta el espíritu humano y la brutalidad de un dictador que la quiere aplastar”, bla, bla.

¡La caída de Putin!.

La aceleración del apoyo armamentista a Ucrania, extendida a elementos ofensivos como los tanques debería, según los más osados, contra el análisis de varios expertos, no sólo provocar la derrota rusa en Ucrania y la recuperación del Dombás y de Crimea, sino además, la caída de Vladimir Putin y un cambio de régimen en Moscú (Foucher).[36]

Al día siguiente, en su discurso ante una multitud en Varsovia, ratifico que “Ucrania nunca será una victoria para Rusia, ¡nunca!” (DW).[37] Se trató de discursos que echó combustible a la guerra en Ucrania, una provocación dentro de la retórica guerrera.[38]

¡Ausente orban!

El presidente estadounidense se reunió en Varsovia, con los llamados nueve de Bucarest, los B-9, considerado como el flanco oriental de la OTAN (Bulgaria, Republica Checa, Estonia, Hungría, Letonia, Lituania, Polonia, Rumania y Eslovaquia). El único ausente fue el presidente húngaro, Viktor Orbán. En represalia por nuevas sanciones, Vladimir Putin anunció el cierre del suministro de petróleo a Polonia (Infobae).[39]

El B-9 fue una iniciativa del presidente polaco en 2015 para mejorar la seguridad y estabilidad entre el mar Báltico y el Mar negro. Se trata de los países que estaban directamente bajo la esfera de influencia de la URSS hasta 1990.

Biden prometió el respeto del artículo 5 de la OTAN en caso de agresión rusa: “un ataque contra uno de nosotros, es un ataque contra todos.” Calificándolo de un juramento sagrado de defender cada centímetro del territorio de la OTAN. Calificó al B-9 como primera línea de la “defensa colectiva” frente a Moscú. Joe Biden insistió nuevamente que “lo que está en juego no solo es Ucrania sino que la libertad” (VOA).[40]

Algunos analistas plantean que Washington ha transformado su intervención a favor de Ucrania en una pieza importante de una estrategia de contención para mantener una  hegemonía mundial,  del nuevo orden mundial al que se oponen China y Rusia entre otros, que era incontestada desde el desplome del llamado socialismo real (Graceffo).[41]

Nuevo orden mundial, imperialismo yanqui: no, Latinoamérica y África.

Una hegemonía que es crecientemente cuestionada en América Latina por la presencia de China y Rusia (Carbayo).[42] También en África (Atalayar)[43] Ello explicaría su retórica en Kiev y Varsovia vinculando a la guerra en Ucrania con un combate entre democracia y autocracia, que remplaza al “terrorismo” de los años 90 y contra Al Qaeda desde 2001. Un enfoque que englobar los desafíos que representan para EE.UU., tanto la República Popular China, como los países emergentes en un mundo multilateral.

Varios, como Simón Tisdall del The Guardian, consideran que la cruzada mundial contra todos quienes se opongan al modelo occidental de democracia propuesta por Joe Biden,  involucra la mitad del mundo y recuerda el discurso de Bush en 2001.[44] Se trataría de una estrategia que no dará resultado al no adaptarse a la nueva situación mundial.

¿Dónde están las pruebas?

En esa estrategia, las acusaciones de crímenes de guerra adquieren un aspecto comunicacional vital para los dos bandos. Por ello, Kamala Harris, vicepresidenta de EE.UU., creó el tono de la justificación de la escalada guerrera en la CSM al afirmar, por primera vez, que su país tiene pruebas de que Rusia ha cometido crímenes contra la humanidad en Ucrania (RFI).[45] Una cuestión que hasta ahora resta confirmar. Al igual que las denuncias de Rusia e, incluso de Human Rights Watch que exigió que Ucrania investigue posibles crímenes de guerra contra prisioneros rusos.[46]

¿Es posible dar una chance a la Paz en Ucrania?¿y la ONU?.

El conflicto Rusia-Ucrania recuerda que la propaganda y la desinformación favorecen visiones maniqueas que no favorecen la resolución pacífica de conflictos, más aún cuando ellos se visten de justificaciones morales. La realidad es que frente a la tragedia ucraniana, la búsqueda de una paz negociada sigue siendo siempre la mejor alternativa. Debería darse una chance a la paz. La mal llamada comunidad internacional o el sistema de seguridad mundial deberían actuar tanto para dar garantías de seguridad a la Federación Rusa como asegurar la integridad territorial a Ucrania. Es la estrategia que se aplica en este tipo de conflictos.

Ciertamente, la invasión rusa es contraria al derecho internacional, basado en el respeto de la integridad territorial. Ello, independientemente de las justificaciones del Kremlin. Lo afirma incluso la República Popular China. En esa perspectiva, y por ser un conflicto sobre una identidad ucraniana muy divisiva históricamente y tener una importante dimensión geopolítica, marcada por zonas de influencia, sin poder justificarse en torno a proyectos  capitalistas o socialistas, o de defensa de la democracia contra la autocracia, es importante recurrir a los análisis llamados “realistas” de conflictos entre imperios y países.

Rusia hoy no se reclama del socialismo. Estados Unidos es un poder hegemónico mundial crecientemente cuestionado. Ucrania y Rusia no son ejemplos de democracia, pero tampoco lo son los Estados Unidos, al menos desde Donald Trump. Hay tantos jerarcas rusos como ucranianos, denunciados todos ellos, entre otros, por los llamados Pandora Papers.[47]

En la práctica los EE.UU., la hegemonía yanqui, enfrascados en la defensa de una hegemonía cada vez más cuestionada a nivel mundial no solo por Rusia y la República Popular China, también por los BRICS, tiene dificultades en adaptarse al mundo multilateral surgido de la crisis de la globalización.

Israel y las negociaciones de paz.

Su estrategia está centrada en la idea de que Ucrania ha demostrado que puede derrotar a Rusia (CNN). En esa medida  los EE.UU. proponen la profundización de la guerra en Ucrania: no están del lado de la paz y de la resolución del conflicto. Una estrategia persistente respecto del conflicto ucraniano según Caitlin Johnstone. Johnstone afirma que EE.UU. saboteó los intentos del anterior primer ministro israelí Neftalí Bennet en avanzadas negociaciones de paz entre Ucrania y Rusia.[48]

“MÚLTIPLES ANÁLISIS AFIRMAN QUE LA ESTRATEGIA ESTADOUNIDENSE DESDE EL FIN DE LA ERA SOVIÉTICA, SERÍA DE IMPEDIR QUE RUSIA VUELVA A TENER UN ROL INTERNACIONAL IMPORTANTE. EN ESA MEDIDA, AL IGUAL QUE EN DIVERSOS PAÍSES LE APLICO A LOS PAÍSES DEL EX BLOQUE SOVIÉTICO ESTRATEGIAS DE CAMBIO DE RÉGIMEN. EN EL CASO DE UCRANIA, FAVORECIENDO SECTORES Y REGIONES TRADICIONALMENTE FAVORABLES A EUROPA OCCIDENTAL. ES LO QUE SE HABRÍA TRADUCIDO EN LA LLAMADA REVOLUCIÓN NARANJA EN 2004, Y EL EUROMAIDÁN EN 2013.”

Atentados Gasoductos Nord Stream

Además de contribuir a una guerra por procuración, EE.UU. ha cometido actos de guerra, según denuncia el afamado periodista de investigación, ganador del premio Pulitzer, Seymour Hersh, (denunció la masacre de My Lai, Watergate, torturas en Abu Ghraib, en Irak, entre otros). La investigación de Hersh concluye en que la marina de EE.UU. es responsable de las explosiones registradas en los gasoductos Nord Stream 1 y Nord Stream 2 en septiembre de 2022.[49] Informaciones acalladas por la mayoría de los medios de comunicación y los temblores

En el mismo sentido, múltiples análisis afirman que la estrategia estadounidense desde el fin de la era soviética, sería de impedir que Rusia vuelva a tener un rol internacional importante. En esa medida, al igual que en diversos países le aplico a los países del ex bloque soviético estrategias de cambio de régimen. En el caso de Ucrania, favoreciendo sectores y regiones tradicionalmente favorables a Europa occidental. Es lo que se habría traducido en la llamada revolución naranja en 2004, y el Euromaidán en 2013.

Existen efectivamente denuncias del rol de Victoria Nuland, ex adjunta del secretario de Estado en el golpe de Estado en 2014 contra el presidente Yanukovich, un cercano de Moscú (Branko Marcetik).[50] Ella fue reinstalada en el gobierno de Joe Biden y preside la política de Washington en el actual conflicto.[51] En un artículo de la revista Foreign Affairs, en 2020, Victoria Nuland afirmó que Rusia es una amenaza peor para el “mundo liberal” que la URSS, durante la Guerra fría. En la práctica el objetivo estadounidense en Ucrania es transformarla en zona de influencia estadounidense. Es lo que revelaría la instalación de laboratorios de armas químicas según el Washington Post y el Daily Mail.

Por otro lado, es indudable, como afirma Michael Hudson que existe un importante interés económico: Washington consiguió restablecer su hegemonía en Europa, a pesar de las veleidades francesas y alemanas.[52]  Es indudable que las petroleras estadounidenses son las principales beneficiarias del brusco corte de suministros de combustibles fósiles rusos (DW).[53]

El proteccionismo yanqui.

De acuerdo a varios observadores, al no privilegiar una solución pacífica en Ucrania, Europa sufre detrimento económico y del Euro en relación al dólar. Hay un alto costo para las condiciones de vida de los ciudadanos europeos (LeMonde).[54] Como Europa no tiene gran cantidad de productos que exportar a EE.UU. para equilibrar la balanza de pagos se ve debilitada. Más aún en condiciones de aumento del proteccionismo estadounidense. Ello se traducirá en una deuda externa enorme por el déficit comercial y una dolarización de la economía.

La hegemonía del imperialismo capitalista yanqui: su control de Europa-África- América Latina y Asia/El sur global.

Para diversos analistas, ante el cuestionamiento de su hegemonía mundial, EE.UU. busca expandir su control no sólo en Europa. También en el Sur del planeta, cerrando bajo llave África, América latina y Asia ante la penetración de capitales y estrechamiento de las relaciones con Rusia y China. En ese contexto, el discurso sobre la mejor democracia ucraniana respecto de la autocracia rusa, surge como una necesidad retórica, para forzar la ruptura también con la autocracia China.

¿El sur global: “Actor del nuevo contexto multilateral”?. Sahara, Yemen.

Para gran preocupación para Washington, importantes regiones del mundo no están directamente involucradas en la guerra de Ucrania. La mayoría de los países emergentes y del sur del planeta no se interesan en un conflicto que se asemeja  a otras guerras locales por territorios o entre países (Yemen, Sudán, Congo, Sahara. etc.). A ello se agregan la preocupación por la crisis migratoria, por las revueltas del hambre y por las desigualdades económicas. Por no mencionar la crisis climática, que la continuidad de la guerra significa retrocesos importantes en los planes de reducción de gases con efecto invernadero.

Según France24, la guerra de Ucrania pone de manifiesto las divisiones entre el Norte y el Sur Global.[55] Según el International Crisis Group (ICG) las potencias emergentes están por un acuerdo de paz (Swissinfo).[56] Por lo pronto en América Latina, países de gran peso regional como Brasil, Argentina y México ya se han negado a apoyar la cruzada armamentista de Washington y la Unión Europea en Ucrania. Ello a pesar de las presiones directas del representante de Washington, Anthony Blinken y del canciller alemán Olaf Scholz (BBC).[57]

El Litio no es para los yanquis/el capital buitre foráneo, será para el Pueblo Chileno.

Al contrario, manifiestan la necesidad de buscar la paz, antes que profundizar la guerra. Ya lo planteó el presidente mexicano Andrés Manuel López Obrador (AMLO) el día de la nacionalización del litio en México. Las riquezas mexicanas, “como el petróleo, no es para Rusia, para China o para EE.UU., sino que para los mexicanos” (Infobae).[58]

El actual presidente brasileño Ignacio Lula Da Silva, cuando era candidato favorito contra Jair Bolsonaro, afirmó en entrevista con la revista Time, que “Zelensky es tan responsable como Putin” de la guerra en Ucrania (Time).[59] Recomendó que el presidente de EE.UU., Joe Biden debiera reducir el conflicto en vez de alentarlo (ElMundo). [60] Destacó así la perogrullada de que EE.UU. y la Unión Europea debieron haber aceptado la exigencia de Putin de que Ucrania no se incorporará a la OTAN. Luego de su elección, le confirmó tanto a Anthony Blinken como al canciller alemán Olaf Scholz, que Brasil no enviará armas a Ucrania y que opta por la búsqueda de una paz negociada. Lula propone un foro de países por la paz (Swissinfo).[61]

Argentina condenó la guerra e hizo un histórico llamado a la paz en lugar de la escalada armamentista (Telam).[62] Gustavo Petro afirma que la posición de Colombia es de hacer una apuesta por la paz y se opone al envío de armas a Ucrania, Argentina, Brasil – Colombia, Mexico..

“LA GUERRA DE UCRANIA PONE DE MANIFIESTO LAS DIVISIONES ENTRE EL NORTE Y EL SUR GLOBAL. SEGÚN EL INTERNATIONAL CRISIS GROUP (ICG) LAS POTENCIAS EMERGENTES ESTÁN POR UN ACUERDO DE PAZ. POR LO PRONTO EN AMÉRICA LATINA, PAÍSES DE GRAN PESO REGIONAL COMO BRASIL, ARGENTINA Y MÉXICO YA SE HAN NEGADO A APOYAR LA CRUZADA ARMAMENTISTA DE WASHINGTON Y LA UNIÓN EUROPEA EN UCRANIA. ELLO A PESAR DE LAS PRESIONES DIRECTAS DE REPRESENTANTE DE WASHINGTON, ANTHONY BLINKEN Y DEL CANCILLER ALEMÁN, OLAF SCHOLZ.”

En África ocurre algo semejante. Diversos gobiernos se resisten a tomar partido sobre el apoyo al armamento y la escalada de la guerra en Ucrania (R. Santodomingo).[63] Por su parte. Sudáfrica, uno de los pilares de la región, acaba de comenzar maniobras navales conjuntas con Rusia y China en aguas de la costa oriental sudafricana. Ello, a pesar de la preocupación expresa de Washington y la condena de Ucrania. Sudáfrica, fue una de las 35 naciones que en 2022 se abstuvieron en una votación de la Asamblea General de la ONU condenando el conflicto (AS).[64] A ello se agrega la relativa neutralidad de los gobiernos de Egipto, Etiopía, Malí y Sudán.

En Asia, la República Popular China, con fuertes tensiones con Washington, influye en varios países de la región y lidera un intento de salida negociada apoyado por países del sur. Otro gigante emergente, India, tiene una posición de estudiada neutralidad por sus relaciones estrechas con Rusia. El gobierno de Narendra Modi, de India pide que Rusia y Ucrania, inicien negociaciones para un acuerdo de paz, que vuelva el diálogo y la diplomacia.[65]

Es indudable que el mundo actual es muy diferente del que surgió del fin de la guerra fría caracterizado por una clara hegemonía estadounidense. Ciertamente,  142 de los 193 países miembros de la ONU apoyaron la resolución, sin carácter ejecutivo, que deplora la agresión de Rusia contra Ucrania. Esto volvió a manifestarse cuando la cumbre del G20 de ministros de finanzas, que acaba de terminar  en India, no alcanzó el consenso para adoptar una declaración de condena contra la invasión rusa de Ucrania, exigida por los países occidentales (BBC).[66]

La mayoría de la Población mundial no condena Rusia…

Existe una situación que de acuerdo a analistas, los Estados que no condenan inequívocamente la agresión rusa constituyen la mitad de la población mundial. Si se agregan los que condenaron a Rusia pero no apoyaron las sanciones occidentales, la cifra ascendería incluso a los dos tercios de la población mundial. Cabe señalar que la gran mayoría de estos países están ubicados geográficamente en la masa continental de Eurasia y en África a lo largo de la «Nueva Ruta de la Seda» de China (Rolf Mützenich).[67]

Efectivamente, la guerra en Ucrania produce una fuerte división de la ONU. De acuerdo a Swissinfo mientras Europa, E.E.UU., Canadá, Australia y Japón, condenan de manera enérgica la invasión rusa; otros países, como China (India los países del Golfo y muchos países africanos, son reacios a tomar partido. Algunos ceden a presiones como Senegal y Emiratos. Ello revela cambios en la geopolítica mundial (Swissinfo).[68] La unanimidad en apoyo a la hegemonía estadounidense no se manifiesta. La existencia de un conflicto entre democracia y autocracia niega la dimensión ofensiva y de cercamiento de Rusia mediante la OTAN.

Y es que la carrera armamentista y el aumento de hostilidades en Europa y en otras regiones en torno a zonas de influencia, se producen desgraciadamente en un contexto de agotamiento de la globalización y de urgente crisis climática que requiere la acción mancomunada de los países e instituciones internacionales.

Se trata de un mundo en que Washington  y sus aliados occidentales no pueden dar lecciones de democracia, comenzando por EE.UU. que aún no se repone de los años Trump. A ello se agrega la resaca del fracaso de las intervenciones armadas de la mal llamada comunidad internacional y las estrategias de cambio de régimen como lo ocurrido con la guerra en Libia y contra la falsa bandera de las armas de destrucción masiva en Irak, entre otras. A ello se agrega el retiro sin victorias de  Afganistán.

Lo cierto es que no existen las bases ideológicas para una guerra fría como la del siglo XX entre libertad y comunismo. Por ello es que en Ucrania, en lugar de una lluvia de cohetes, armas de todo tipo y tanques ofensivos que van a perpetuar el conflicto, es tiempo de parar el horror de la guerra echar andar la diplomacia para la resolución del conflicto.

Por último, señalemos que el contexto actual revela los complejos contornos de un nuevo desorden internacional, creado por el cuestionamiento de la hegemonía del 11% del planeta (EE.UU., Europa y Japón). El surgimiento de nuevos actores en el mundo multilateral, e incluso multipolar requiere el funcionamiento de instancias internacionales capaces de asegurar la resolución pacífica de conflictos, permitiendo que la humanidad se concentre en enfrentar los grandes desafíos del siglo XXI, en primer lugar, la crisis climática.

Lo subrayado interpolado es nuestro.

¡Si quieres la paz, prepárate para la guerra, según los jerarcas del club Bilderberg!.

Por Prof. Moreno Peralta Iwa

Secretario Ejecutivo ADDHEE.ONG

PARA MIS QUERIDOS AMIGOS  Prof. Dra. Patricia Mena Ledesma y  Prof. Dr.  Héctor Muñoz Cruz. Académicos de la Universidad Pedagógica Nacional/Oaxaca México y Universidad autónoma Metropolitana México D.F., defensores de la Paz, “como el respeto por el Derecho Ajeno”…

El imperialismo capitalista yanqui y su nuevo orden mundial, su régimen  estadounidense de turno, el pentágono y su principal  testaferro, la Unión Europea/OTAN, asumen la exigencia  de la globalización del capital impuesta por el Club Bilderberg,  que  las malditas guerras constituyen el estado natural y original de la Humanidad. Evidentemente, esta base, droga maldita, es fundamental en el funcionamiento, manipulación y enajenación del individuo masa consumista – éste  no es bueno ni malo, sino indolente-,  por parte de los medios mediáticos de (in) comunicación globalizados de propiedad de la oligarquía empresarial, financiera, bancaria/agiotista, agrícola monopolista, dueños de la celestina universal/ el dinero. El escapista,  acomplejado individuo se pasa la vida preguntándose: “¿Qué hacer?, “no entienden nada, por causa  de su enajenación,  es una suma de vacilaciones, dudas y  permanentes escapes.  Todo  en el marco de su cobardía. El perverso sistema capitalista globalizado le ha impuesto que la guerra es la paz,  la libertad es la esclavitud, la ignorancia es la fuerza y  acentúa que se defiende a los pueblos bombardeándolos.  ¿Quién pudiera sacudir de su indiferencia a tanta gente enajenada?.  Es indignante que tengan que seguir las espantosas matanzas en Palestina, Siria, Irak, Libia, etc.  Pero la borregada  vive al día sin pensar y permite muy tranquila que estos crímenes de lesa humanidad continúen…

El Papa Francisco, vicario de Cristo, referente ético moral de la Humanidad, acentúa, sin que nadie le escuche,: “ la Paz es algo que en realidad no conocemos, algo que solo ansiamos y  vislumbramos”.  Para nosotros la Paz es un ideal . Los mercachifles oligarcas,  financieros, agiotistas agrícolas monopolistas, a través de sus medios  mediáticos de (in) comunicación globalizado, especialmente la telebasura/internet, le replican a diario  al Vicario de Cristo, “si quieres la Paz prepárate para la guerra.”

 En sendas conferencias como profesor visita, yo he sostenido que: la Paz es muy antigua,  como pensamiento,  deseo y  como objetivo e ideal. Hace siglos que existe el omnipresente mandamiento cristiano de “no matarás “, que el individuo supuestamente racional/cristiano en su mayoría respeta.  Pero, aún, hay casos que éste individuo, supuestamente racional, actúa peor que un animal irracional. Este individuo, un bellaco de pocas luces, no entiende, porque no tiene la capacidad para hacerlo, por causa de su enajenación que “no matarás”, quiere decir que no debes privarte  a ti mismo del prójimo, porque éste no es un extraño. Todo el mundo es una suma de relaciones humanas. La vida se compone en realidad, de  relaciones entre el mundo y cada persona.

¿Cómo podemos alcanzar la verdadera Paz? Como todo progreso humano tendrá que venir de una educación  libertaria, laica, pública de calidad y  valga la redundancia, liberadora de la persona humana.

En el marco del perverso sistema capitalista globalizado, la tiranía más despótica, desalmada e inmoral, conocida por el género humano,  no creo  en una mejora de la Humanidad. “Los historiadores oficiales”, con mucho cuento y poca historia, nos reiteran que toda voluntad  de transformar al mundo conduce a la violencia y  a las malditas guerras. Por mi parte, considero incurable esta patética realidad orwelliana capitalista  salvaje globalizada reinante,   destacándose por la mentira, la injusticia y la maldad. Veamos la indiferencia, la falta de Humanidad de los regímenes europeos con los refugiados que huyen de las malditas guerras, y los migrantes que huyen del hambre y la miseria…

 Para los plutócratas empresarios  del club Bilderberg que imponen el perverso sistema capitalista salvaje y su nuevo orden mundial, en el contexto  de las Piedras Guías  de Georgia/USA ,dueños de la celestina universal, unidos  férreamente, en defensa de sus sórdidos, avaros intereses materiales, las malditas guerras constituyen  el estado natural y original de la Humanidad. Con su desvergonzado maquiavelismo,  su fría avaricia y su profunda inmoralidad, siguen priorizando que  el fin justifica los medios. Son los únicos responsables del horror/terror,  y de la inutilidad de las malditas guerras.  Con su codicia guerrerista han demostrado  y demuestran  su desprecio por la vida: la vida,  en su modelo de sociedad  degenerada, del consumo, las drogas/narcotráfico y tráfico de armas, la vida no vale nada.

 La Paz la entiendo, al igual que el benemérito maestro de la Patria Continente, América Latina y el Caribe, Lic. Benito Juárez García – el derecho ajeno es la paz-, Presidente de México, no sólo la militar y la política, sino la  de cada uno consigo mismo, con su prójimo, en el marco de  la armonía de una vida llena de sentido y de amor…

Basta ya de eufemismos, las malditas guerras no se terminarán jamás mientras  esté vigente el maldito  sistema capitalista salvaje globalizado. Un sistema político/económico, irracional, degenerado e inhumano.  Un estado de perversión y depravación social de la hegemonía más despótica y desalmada que ha tenido  la Humanidad. Solo nos queda la esperanza revolucionaria que nos garantiza que las leyes de la dialéctica/histórica son incontenibles.

Gracias al triunfo del socialismo a escala humana- no confundirlo con la socialdemocracia, balón de oxígenos del capitalismo salvaje globalizado, agonizante-, con irrestricto respeto por los Derechos del Ser humano y del Entorno Ecológico, la Humanidad por fin  empezará a dirigir y mejorar su destino en su  verdadero sentido en nuestro desgraciado planeta, en manos  de la perversidad del sistema capitalista globalizado.

El más voraz y criminal depredador de nuestro planeta el sistema capitalista globalizado, le llegará su hora, “más temprano que tarde, la Razón Rebelde del Ser Humano como Derecho Natural, consciente se abrirá  paso  en medio de la estupidez, la corrupción, la impunidad, las drogas, la depravación y las malditas guerras , y sus intereses estarán por primera vez y para siempre en el centro de la vida económica, social, educacional/cultural. Solo en esta dirección todo lo que hagamos, será trascendente por y para enaltecer la persona…

Como colofón, reitero  una vez más, el capitalismo salvaje  globalizado no ha resuelto los vitales problemas del ser humano, en el sentido de hacerlo un poco dichoso, por lo menos,  menos desdichado que sus antepasados.

Con esperanza y memoria,  “ciudadanos conscientes no acepten lo habitual como cosa natural, pues, en tiempo de confusión generalizada, arbitrariedad consciente y deshumanizada, corrupción desenfrenada, impunidad descontrolada, nada debe parecer imposible de cambiar”. Escuchen al genial maestro Miguel de Cervantes y Saavedra, “Cuando la ignorancia y la prepotencia de los dueños de la celestina universal pretenden convertirlas en Derecho,  la idea, el desafío de cambiar el mundo, no es una locura ni una utopía sino “Justicia Plena”.

“Solo merecen la libertad y la vida, quienes cada día  las conquistan: “Luz más Luz”….

Prof. Moreno Peralta /IWA

Secretario Ejecutivo Addhee. Ong

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