lunes, 27 de enero de 2014



El Pueblo Soberano, la Ciudadanía, La Constitución y la Ley Electoral…

A la memoria de esclarecidos y consecuentes Maestros- Maestro (a) es el formador del Ser Humano en general y de su conciencia Social en especial-, Prof. Dr. Pedro Vuskovic Bravo, Prof. Dr. Luis Bisequertt Susartte, Senador Alejandro Chelén Rojas, Prof. Dr. Eduardo Novoa Monrreal, Prof. Ing. Enrique Kirberg R, Prof. Dr. Edgardo Enriquez Frodden, Prof. Arquitecto Fernando Castillo Velasco, Distinguidos Academicos perseguidos e ignorados por la Dictadura de marras y sus herederos…

La militancia cívica consecuente que suele deparar ondas satisfacciones, tiene sus exigencias, no se puede actuar a medias, como lo hacen los pusilánimes, e inefables individuos de Centro Izquierda- no hay un punto medio entre la Libertad y la esclavitud. “Los caminos intermedios corresponden a la antesala de la traición”-, es preciso darse por entero, consagrarse sin reservas en el marco de la alternativa Hamletiana: ser o no ser. El civismo equivale a la práctica consecuente de la ciudadanía. En Grecia y en Roma la ciudad constituía un Estado. El concepto de ciudadanía se identificaba con el de nacionalidad.

Actualmente entre nacionalidad y ciudadanía existe una gran afinidad, aunque nacionalidad exprese un sentido de amplia comunión espiritual, y ciudadanía tenga una significación política.

Atenas, fue la cuna de la Democracia. Los atenienses fueron los primeros en mostrar, a un pueblo gobernarse por sí mismo.

Pericles, el más brillante Gobernante que tuvieran los Atenienses, puntualizo: “La Constitución soberana que nos rige ha recibido el nombre de Democracia- “El Gobierno del Pueblo, para y por el Pueblo”-, porque su fin es el de servir al mayor número de ciudadanos y, no a la minoría. Hoy, la plutocracia de los oligarcas empresariales de la hegemonía capitalista globalizada/globalización del capital, un 1%, para quienes “el fin justifica los medios”, con la complicidad de sus testaferros, el poder castrense y la clase politicastra centrista, le dieron un giro de 180º a la democracia ateniense: la utilidad, la ganancia para la minoría. La mayoría que se vaya al carajo…

Otro sabio griego, Aristóteles, afirmo genialmente: “Es preciso que los Magistrados, los Jueces sean elegidos por todos o por sorteo. Las dignidades no se deben distribuir según el monto de la fortuna del individuo y las funciones no deben durar muy largo tiempo. Todos los ciudadanos son iguales ante la Ley y la decisión de todas las cosas que afecten a éste deben depender de una Asamblea Ciudadana.

Es verdad que las democracias atenienses y romanas estuvieron lejos de llevarse  a la práctica con un alcance aproximado a su concepción teórica, porque ésta coexistió con la esclavitud. Evidentemente, esto implica un flagrante contrasentido como también lo es llamar Constitución al desaguisado adefesio impuesto por la dictadura de marras, en 1980…

La Humanidad, hasta nuestros días en su lucha-“luchar es vivir”-, por la Democracia Plena, ha tenido que pagar un precio muy alto: sangre, martirios, muertes, genocidios, “guerras comerciales de los ricos”, etc. Desde la revolución de Espartaco hasta la Revolución Francesa, cuando los Derechos Humanos quedaron incorporados al ideal básico de la Democracia Plena, no ha pasado un día, un sólo uno sólo, en que el mercenario al servicio de la plutocracia, no haya asesinado víctimas inocentes para arrebatarles a los Pueblos sus riquezas básicas. El odio, las matanzas del pentágono, y de la otan ha impuesto la sombra de Caín, eternamente, para imponer la Paz de los cementerios. Guerra entre gentes que ni se conocen y aborrecen. A los cristianos guerreristas, yo les pregunto ¿No entienden la palabra de Cristo?, o será que éste afirmo que traía la espada y no la Paz…

Los testaferros de la globalización del capital, la plutocracia, repiten a través de sus medios mediáticos de (IN) comunicación globalizados: “la Paz sin armas es una ilusión”.

A la Humanidad por lo menos le queda el ejemplo de un consecuente  Ser Humano que defendió la vida, la Libertad y la Democracia Plena, el Presidente de México Lic. Benito Juárez García, quien afirmó: “la Paz es el respeto al derecho ajeno”. Genialmente, este jurista le escribió la lápida al  capitalismo salvaje globalizado: “El triunfo de la plutocracia de la reacción oligárquica es moralmente imposible”…

La demencia del imperialismo yanqui globalizado/globalización del capital, en su desesperación por apoderarse de las riquezas básicas de los países subdesarrollados está llegando a un extremo muy peligroso. Tan perversos como estúpidos (el 1%), les llevan a autodeclararse, “la excepción en el desgraciado planeta”, y asegurarle a la inútil burocracia de Naciones Unidas que “impondrá la democracia en la medida de lo posible por las armas”, por boca del premio Nobel de la Paz Obama en la última asamblea.

Es inevitable la reminiscencia con la esclavitud de la antigüedad. En nuestros días existe también una esclavitud en los Países subdesarrollados especialmente de niños y mujeres. Esta situación inhumana, amoral e irracional constituye un atentado contra la Justicia, un crimen de lesa humanidad. El silencio, frente a estos crímenes significa otorgamiento, responsabilidad por omisión. A la masa enajenada por la educación del lucro- “un bien de consumo”- y los medios mediáticos de (IN) comunicación globalizados solo le preocupa la telebasura, la legalización de las drogas, especialmente la marihuana, el rock and roll, el peloteo, la prostitución infantil, y los matrimonios igualitarios. Snobs, estereotipos muy promovidos por el lobby gay y el lobby socialdemócrata centrista. ¿Qué carajo importan las víctimas inocentes que son asesinadas en Palestina por el sionismo judío/apartheid judío, en Siria, en Irak, el Libia, en Afganistán, etc, por el terror yanqui imperialista?...

En el Chile del nunca jamás las elecciones se llevan a cabo en el marco de los engendros antidemocráticos la Constitución y el decreto Ley binominal, impuestos por el imperialismo yanqui y sus testaferros: la dictadura terrorista cívico-militar y  la sofofa: las gentes deben votar por negro o plomo, dos ofertas: La de la oligarquía empresarial sofofa y la de sus administradores concertacionistas/la nueva mayoría. La misma bazofia con distintos olores. Cuando el Pueblo Soberano decide-vox populi, vox dei-, significa que nada existe por encima de su voluntad. Esto no quiere decir que sea esa la voluntad de todos los ciudadanos que lo integran, porque las unanimidades son imposibles en la práctica, sobre todo cuando se vive en un clima de Libertad Plena. Esto último sólo ocurre en un gran país soberano. El Prof. Georg Hegel, genialmente lo preciso: “no se tiene un País grande, ni un gran país cuando su destino se define en otras partes”…

En las decisiones soberanas del Pueblo se buscan las coincidencias en los grandes planteos generales. La soberanía de una Nación en el concierto mundial no es legítima sino parte de la Soberanía del Pueblo que se manifiesta por medio del voto secreto limpiamente emitido. A consecuencia de su voto, todos y cada uno de los ciudadanos se comprometen tácitamente a acatar de antemano la expresión mayoritaria que se expresara en los escrutinios.

Como colofón a las reflexiones de este trabajo solicitado por mis estudiantes, yo preciso, que al Pueblo Chileno, el 11 de Septiembre de 1973, se le privo de su Soberanía, se pisoteo su Constitución y se dejo sin la Ley fundamental a la Universidad Chilena, la autonomía, académica territorial y administrativa. Yo no coincido ¿Por qué debe ser menos criminal el robo o la usurpación de bienes materiales que el despojo de un derecho de cuyo ejercicio depende el destino de la sociedad entera? ¿Y por qué se llama delincuente al que defrauda los dineros del Estado y no al que defrauda en sufragio de la Soberana Constitución?

El repudio del Ciudadano consciente a las artimañas electorales con las que se maneja la clase politicastra en este País sin nombre desde hace 4 décadas debe ser total con la NO asistencia a votar en el elección alguna, hasta que el Pueblo Chileno recupere su Soberanía su Constitución y la Universidad Chilena su Autonomía. Pero la oligarquía empresarial sofofa, y el poder castrense no quieren saber nada de una Asamblea constituyente, de un plebiscito en el cual el Pueblo Soberano pueda decidir sobre su destino. La clase politicastra autoproclamada de Centro Izquierda y Centro Derecha se han comprometido a seguir parchando la Constitución de la dictadura de marras y evidentemente la Ley binominal de elecciones. Ni hablar de autonomía universitaria.

No se puede negar que el fanatismo, la resignación fundamentalista religiosa y la enajenación por causa de la indigencia educacional y la telebasura ha impuesto en la mayoría del Pueblo, la desesperanza, que no nace de una obstinada adversidad ni en el agotamiento de una lucha desigual. Proviene de que no se perciben más las razones para luchar, e incluso, que no se sepa, si hay que luchar: ¡Es lo que hay! Lo característico de toda enajenación es no tener conciencia de ella.

Si no se cambia la Constitución, y el Pueblo recupera su Soberanía, se asume la educación pública laica de calidad y gratuita para todos, para terminar con las marginaciones y alcanzar la integración social sólo se estará profundizando en el Pueblo el culto a la indolencia.
Con esperanza y memoria

Prof. Moreno Peralta/IWA
Secretario Ejecutivo

Addhee.ONG

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