ESTADOS UNIDOS REACCIONA CON INSOLENCIA Y AGRESIVIDAD A LA SOLICITUD DE ÓRDENES DE DETENCIÓN EN CONTRA DE SU TESTAFERRO BENJAMIN NETANYAHU POR CRÍMENES DE GUERRA EN GAZA EMITIDA POR LA CORTE PENAL INTERNACIONAL.
Por Thalif Deen – Inter Pres Service
¡Hasta cuando el género
humano, la Humanidad, seguirá soportando las bellaquerías, la insolencias, las
impudicias e insanias de la clase empresarial, plutocrática oligarca, dueña de
la Celestina Universal del Club Bilderberg, que impone el sistema capitalista
salvaje con una tiranía despótica, perversa, desalmada e inmoral regida por
Estados Unidos y sus testaferros de la Unión EUROPEA, Japón y el régimen genocida sionista colonialista israelí,
¡OCCIDENTE!, Prof. Moreno Peralta IWA, Berlín 29/05/2024.
NACIONES UNIDAS – La decisión de la Corte Penal
Internacional (CPI) de solicitar órdenes de detención contra el primer ministro
israelí Benjamín Netanyahu, y su ministro de Defensa, Yoav Gallant, provoca una
agresiva e insolente reacción tanto del gobierno de Estados Unidos, Joe
Biden, como de un grupo de senadores proisraelíes del Congreso de ese país.
Los nombres que figuran en las órdenes de detención
de la CPI incluyen también a Yahya Sinwar, Mohammed Diab Ibrahim Al-Masri
(Deif) e Ismail Haniyeh, todos dirigentes del palestino Hamás.
Como era de esperar, el gobierno de Biden,
partidario inquebrantable de Israel y al que le sigue proporcionando miles de
millones de dólares en armas estadounidenses utilizadas en la devastación de Gaza,
calificó los cargos de la CPI de «escandalosos» y rechazó la comparación de
Israel con Hamás en los cargos de crímenes de guerra y crímenes contra la
humanidad.
“Permítanme ser claro: independientemente de lo que
pueda insinuar este fiscal, no hay equivalencia -ninguna- entre Israel y
Hamás”, afirmó en un comunicado. “Siempre estaremos junto a Israel contra las
amenazas a su seguridad”, añadió.
Sarah Leah Whitson, directora ejecutiva de
Democracia para el Mundo Árabe Ahora (DAWN, en inglés), dijo a IPS que la
solicitud del fiscal de órdenes de detención contra funcionarios israelíes y de
Hamás es un hito en materia de rendición de cuentas frente a décadas de
impunidad por crímenes de guerra y contra la humanidad en Palestina.
«La promesa del Congreso estadounidense de atacar
al fiscal y a la CPI será un ataque a la justicia internacional y al Estado de
derecho; no esperen que otros países se sometan a las órdenes de detención de
la CPI si Estados Unidos no lo hace», apuntó.
“Cualquier esfuerzo por ‘equilibrar’ las órdenes de
detención contra funcionarios israelíes con un número igual de órdenes de
detención contra funcionarios palestinos sería una concesión vergonzosa a los
cálculos políticos”, opinó Whitson.
En una carta dirigida la semana pasada al fiscal de
la CPI, Karim A. Khan, y en previsión de las acusaciones contra Israel, un
grupo de 12 senadores estadounidenses afirmaba: “Escribimos en relación con las
informaciones según las cuales la Corte Penal Internacional podría estar
considerando emitir órdenes internacionales de detención contra el primer
ministro Benjamin Netanyahu y otros funcionarios israelíes. Tales acciones son
ilegítimas y carecen de base legal, y si se llevan a cabo darán lugar a severas
sanciones contra usted y su institución”.
“Al emitir órdenes de detención, estarían poniendo
en tela de juicio la legitimidad de las leyes, el sistema jurídico y la forma
democrática de gobierno de Israel. Emitir órdenes de detención contra los
dirigentes de Israel no sólo sería injustificado, sino que pondría de
manifiesto la hipocresía y el doble rasero de su organización”, prosiguieron.
“Por último, ni Israel ni Estados Unidos son
miembros de la CPI y, por tanto, están fuera de la supuesta jurisdicción de su
organización. Si emiten ustedes una orden de detención contra autoridades
israelíes, lo interpretaremos no solo como una amenaza a la soberanía de
Israel, sino también a la de Estados Unidos”, advertía la carta.
Aunque la solicitud debe ser aprobada por los
jueces de la CPI, el “anuncio es un golpe para Netanyahu y probablemente
avivará las críticas internacionales a la estrategia de guerra de Israel en
Gaza”, afirmó The New York Times el 20 de este mes.
Nihad Awad, director ejecutivo nacional del Consejo
de Relaciones Islámico-estadounidenses (CAIR), declaró: “Al igual que el
presidente Biden reconoció que la orden de detención de la Corte Penal
Internacional contra Vladimir Putin por crímenes de guerra en Ucrania estaba
‘justificada’, el presidente debería hacer lo mismo ahora en relación con las
solicitudes de orden de detención solicitadas por el fiscal de la CPI contra
Benjamin Netanyahu por crímenes de guerra en Gaza”.
“Los crímenes de guerra son crímenes de guerra,
independientemente de que los cometan los llamados aliados estadounidenses”, afirmó.
“Biden no debe interferir en las claras y creíbles
solicitudes de orden de detención que el fiscal de la CPI está solicitando
contra los dirigentes israelíes responsables de crímenes de guerra genocidas en
Gaza, ni nuestra nación debe seguir financiando esos crímenes de guerra”.
“Benjamin Netanyahu es un asesino de masas racista
que no tiene intención de detener su campaña de hambre y matanzas en Rafah y el
resto de Gaza a menos que el presidente Biden le obligue a parar. Ese momento
ha llegado”, dijo Awad.
Michael Omer-Man, director de investigación sobre
Israel-Palestina de DAWN, dijo a IPS que, si bien el fiscal ha solicitado estas
órdenes de detención iniciales por crímenes de guerra relacionados con el
conflicto en Gaza, las órdenes que vengan después deberían acusar a
funcionarios israelíes por su actual empresa de asentamientos, que también son
crímenes de guerra según el Estatuto de Roma.
Norman Solomon, director ejecutivo del Institute
for Public Accuracy, dijo a IPS que la propia CPI ha sido culpable durante
mucho tiempo de enjuiciamientos selectivos confinados por la influencia de la
política de poder mundial. Las noticias de esta semana, con acciones legales
apropiadas contra Israel y Hamás, dan esperanzas de que la CPI haya comenzado a
salir de su auto confinamiento etnocéntrico.
Los principales factores de la actual matanza de
civiles en Gaza por parte de Israel son el militarismo extremadamente cruel de
ese país y el enorme apoyo a ese militarismo por parte del gobierno de Estados
Unidos. Pocas veces una guerra ha sido tan amplia y fervientemente condenada
por tantas personas y naciones de todo el mundo.
“La guerra de Gaza es realmente un crimen contra la
humanidad a escala masiva y continua. Deben exigirse responsabilidades no solo
a los dirigentes israelíes que infligen esta matanza, sino también al gobierno
estadounidense que sigue haciéndola posible”, declaró Solomon, director
nacional de RootsAction.org y autor de “War Made Invisible: How America Hides
the Human Toll of Its Military Machine.” (“La guerra invisible: Cómo Estados
Unidos oculta el costo humano de su maquinaria militar”).
En términos prácticos, dijo, una norma única en
materia de derechos humanos es difícil de mantener en el discurso público y
prácticamente imposible de hacer cumplir a escala mundial.
Los crímenes de guerra y de lesa humanidad, tal y
como se abordan en el nuevo anuncio de la CPI, fueron cometidos con toda
seguridad por los dirigentes tanto de Israel como de Hamás desde principios de
octubre de 2023. Aunque, por supuesto, ellos niegan tales acusaciones, las
consecuencias humanas de los crímenes que supervisaron son terribles, señaló.
Desde el punto de vista del gobierno de Estados
Unidos, argumentó, principal patrocinador de Israel, la verdad del asunto es
inaceptable. Y así, el presidente Biden se sintió obligado a denunciar
inmediatamente las solicitudes de la CPI de las órdenes de detención contra el
primer ministro y el llamado ministro de Defensa de Israel.
«Lo que Benjamin Netanyahu y Yoav Gallant han estado
haciendo durante más de siete meses es indefendible desde cualquier punto de
vista moral o legal», subrayó Solomon.
Mucho mayores que los repugnantes crímenes contra
la humanidad cometidos por Hamás -que deben ser condenados inequívocamente- son
los crímenes contra la humanidad cometidos por el gobierno israelí, que han
sido totalmente subvencionados por la ayuda militar y el apoyo retórico de
Estados Unidos, afirmó.
En su declaración, el fiscal de la CPI afirmó que
“sobre la base de las pruebas recogidas y examinadas por mi Fiscalía, tengo
motivos razonables para creer que Yahya Sinwar (jefe del Movimiento de
Resistencia Islámica -”Hamás”- en la Franja de Gaza), Mohammed Diab Ibrahim
al-Masri, más conocido como Deif (comandante en jefe del ala militar de Hamás,
conocidas como las Brigadas Al-Qassam), e Ismail Haniyeh (jefe del Buró
Político de Hamás) son penalmente responsables de los siguientes crímenes de
guerra y crímenes contra la humanidad” cometidos en el territorio de Israel y
del Estado de Palestina (en la Franja de Gaza) desde al menos el 7 de octubre
de 2023:
– Exterminio como crimen de lesa humanidad,
contrario al artículo 7(1)(b) del Estatuto de Roma;
– Asesinato como crimen de lesa humanidad,
contrario al artículo 7(1)(a), y como crimen de guerra, contrario al artículo
8(2)(c)(i);
– La toma de rehenes como crimen de guerra, en
contra de lo dispuesto en el artículo 8(2)(c)(iii);
– La violación y otros actos de violencia sexual
como crímenes de lesa humanidad, en contra de lo dispuesto en el artículo
7(1)(g), y también como crímenes de guerra en virtud del artículo 8(2)(e)(vi)
en el contexto del cautiverio;
– Tortura como crimen de lesa humanidad, contrario
al artículo 7(1)(f), y también como crimen de guerra, contrario al artículo
8(2)(c)(i), en el contexto del cautiverio;
– Otros actos inhumanos como crimen de lesa
humanidad, contrario al artículo 7(l)(k), en el contexto del cautiverio;
– Trato cruel como crimen de guerra, contrario al
artículo 8(2)(c)(i), en el contexto del cautiverio; y
– Ultrajes a la dignidad personal como crimen de
guerra, contrario al artículo 8(2)(c)(ii), en el contexto del cautiverio.
En cuanto a Israel, el Fiscal de la CPI dijo que
“sobre la base de las pruebas reunidas y examinadas por mi Fiscalía, tengo
motivos razonables para creer que Benjamin Netanyahu, primer ministro de
Israel, y Yoav Gallant, ministro de Defensa de Israel, son penalmente
responsables de los siguientes crímenes de guerra y crímenes de lesa
humanidad”, cometidos en el territorio del Estado de Palestina (en la Franja de
Gaza) desde al menos el 8 de octubre de 2023:
– La inanición de civiles como método de guerra y
como crimen de guerra contrario al artículo 8(2)(b)(xxv) del Estatuto;
– Causar intencionadamente grandes sufrimientos o
atentar gravemente contra la integridad física o la salud, en contra de lo
dispuesto en el artículo 8(2)(a)(iii), o tratos crueles como crimen de guerra,
en contra de lo dispuesto en el artículo 8(2)(c)(i);
– Homicidio doloso contrario al artículo
8(2)(a)(i), o Asesinato como crimen de guerra contrario al artículo 8(2)(c)(i);
– Dirigir intencionalmente ataques contra una
población civil como crimen de guerra contrario a los artículos 8(2)(b)(i), u
8(2)(e)(i);
– Exterminio y/o asesinato contrario a los
artículos 7(1)(b) y 7(1)(a), incluso en el contexto de muertes causadas por
inanición, como crimen contra la humanidad;
– Persecución como crimen de lesa humanidad
contrario al artículo 7(1)(h);
– Otros actos inhumanos como crímenes de lesa
humanidad contrario al artículo 7(1)(k).
“Mi oficina sostiene que los crímenes de guerra
alegados en estas solicitudes fueron cometidos en el contexto de un conflicto
armado internacional entre Israel y Palestina, y de un conflicto armado no
internacional entre Israel y Hamás (junto con otros grupos armados palestinos)
que se desarrollaba en paralelo. Sostenemos que los crímenes de lesa humanidad
imputados se cometieron como parte de un ataque generalizado y sistemático
contra la población civil palestina en aplicación de una política de Estado.
Estos crímenes, en nuestra evaluación, continúan hasta el día de hoy”.
«Mi oficina afirma que las pruebas que hemos
reunido, incluidas entrevistas con supervivientes y testigos presenciales,
material de vídeo, fotográfico y sonoro autentificado, imágenes por satélite y
declaraciones del presunto grupo perpetrador, demuestran que Israel ha privado
de forma intencionada y sistemática a la población civil de todas las partes de
Gaza de objetos indispensables para la supervivencia humana.»
…………………
*Corresponsal-jefe de la Oficina de las Naciones
Unidas y Director Regional de IPS Norte América. Ex editor adjunto del Sri
Lanka Daily News, fue redactor editorial senior en The Standard de Hong Kong.
Ex Director de Mercados Militares Extranjeros en Defense Marketing Services
(DMS); Analista Senior de Defensa en Forecast International; y editor militar
de Medio Oriente / África en Jane’s Information Group.
………………………
Lea también
Guernica, Palestina y las guerras de exterminio
contra los pueblos
La destrucción de Guernica, el 26 de abril de 1937,
¿qué tiene que ver con el genocidio que lleva a cabo Israel contra el Pueblo Palestino?
Poco y mucho. Poco, porque es arriesgado establecer paralelismos entre épocas
tan distintas. Y mucho, porque las dos tragedias se relacionan en algunos
aspectos. Uno es la deshumanización del adversario. Uno es la
deshumanización del adversario. Así como el dictador fascista
Francisco Franco Bahamondes presumía que socialistas, comunistas,
anarquistas, gitanos y otros grupos eran seres inferiores, el ministro de
Defensa israelí, Yoav Gallant, afirma que estamos luchando contra
animales y el ministro de Finanzas, Bezalel Smotrich, declara que no
hay palestinos porque no hay Pueblo Palestino:
https://www.jornada.com.mx/2024/05/24/opinion/016a1pol
Lo subrayado/interpolado es nuestro.
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