Doscientos años de la Doctrina Monroe, en el patio trasero latinoamericano/ estadounidense/yanqui, un sinfín de sufrimientos para América Latina
Por: Xinhua/desde Latinoamérica/Panamá,
prensa Mare Argentina, Other News, Sputnik, RT, La Jornada de México, Red
latina sin fronteras. Sur, ACHEI, Utopía, Argentina Indymedia/ADDHEE.ONG:
Tras más de 300 años de dominio colonial europeo, América
Latina, una tierra rica y fértil, había visto el amanecer de la independencia
nacional a principios del siglo XIX, antes de convertirse en un manjar en boca
de su vecino, Estados Unidos.
En abril de 2009, durante la V Cumbre de las Américas, el
entonces presidente de Venezuela, Comandante Hugo Chávez Frías,
entregó a su homólogo estadounidense, Barack Obama, un libro titulado "Las
venas abiertas de América Latina", en el que su autor, el maestro Eduardo
Galeano, de la Patria continente América Latina y el Caribe, afirma que
"el subdesarrollo de América Latina
proviene del desarrollo ajeno y continúa alimentándolo".
Tras más de 300 años de dominio colonial europeo, América
Latina, una tierra rica y fértil, había visto el amanecer de la independencia
nacional a principios del siglo XIX, antes de convertirse en un manjar en boca
de su vecino, Estados Unidos.
En diciembre de 1823, el quinto presidente estadounidense,
James Monroe, pronunció un discurso ante el Congreso proclamando una
"América para los americanos". Desde entonces, Estados Unidos ha
abrazado la Doctrina Monroe para practicar el hegemonismo y el
intervencionismo, lanzando invasiones, dando golpes de Estado, imponiendo
sanciones y realizando infiltraciones e injerencias contra América Latina una y
otra vez.
Hoy en día, la hoja hegemónica de la Doctrina Monroe sigue
punzando profundamente en "las venas" de los pueblos
latinoamericanos, causando graves daños a la seguridad política, al desarrollo
económico, a la estabilidad social y a la vida cotidiana de la región.
Invasiones
La madrugada del 20 de diciembre de 1989, en Ciudad de
Panamá, una violenta explosión puso nerviosa a Trinidad Ayola. Se preocupó por
la seguridad de su marido, quien estaba asignado a la defensa del Aeropuerto de
Paitilla ubicado en la capital panameña.
Sus peores miedos se hicieron realidad. "Cuando lo
fueron a identificar, yo no pude, no tuve fortaleza para identificar, toda la
espalda estaba llena de huecos", dijo.
Ese día, Estados Unidos. lanzó una operación militar
denominada "Causa Justa" para invadir Panamá y derrocar al Gobierno
de Manuel Noriega. Durante la invasión, un gran número de casas y edificios
fueron destruidos, y aunque el Pentágono cifró en 500 el número de
fallecimientos de soldados y civiles panameños, la cifra real de muertos y
heridos sigue siendo un misterio.
Como presidenta de la Asociación de Familiares y Amigos de
los Caídos el 20 de diciembre, Ayola ha trabajado durante años para sacar a la
luz la verdad sobre esta invasión. A su juicio, lo ocurrido dejó un trauma aún
no superado por muchos panameños.
"La Causa Justa
eran ellos detrás de sus intereses, para nosotros, no. Fue una gran injusticia
lo que vivimos", apuntó.
El mejor largometraje documental ganador de los Óscar de
1992, "El engaño de Panamá", reveló las razones por las que Estados
Unidos. lanzó esta invasión: dejar que el Ejército estadounidense permaneciera
desplegado a largo plazo, instalar un nuevo Gobierno que defendiera los
intereses de Estados Unidos., salvaguardar los intereses de los consorcios
estadounidenses, y ocupar de forma permanente el Canal de Panamá.
Durante los últimos 200 años, Estados Unidos. ha consolidado
su posición hegemónica en América Latina mediante invasiones militares directas
o intervenciones indirectas para lograr una serie de objetivos, como
anexionarse territorios, derrocar a Gobiernos y obtener derechos de uso de los
canales. Por ejemplo, lanzó la guerra
entre Estados Unidos y México, en la que México perdió alrededor del 55 por
ciento de su territorio; ocupó militarmente Haití y saqueó su riqueza nacional;
invadió Granada y derrocó al Gobierno; envió buques de guerra para
"supervisar" las elecciones de la República Dominicana, etc.
Según un estudio de la Universidad de Tufts, Estados Unidos ha lanzado casi 400 intervenciones
militares en todo el mundo desde su independencia en 1776 hasta 2019, el 34 por
ciento de las cuales se dirigieron contra países de América Latina y el Caribe.
"Desde sus inicios, la Doctrina Monroe se basó en la
idea de que Estados Unidos tendría la excepcionalidad de ser el pueblo elegido
para dirigir a los demás, aunque ello supusiera intervenciones militares,
golpes de Estado y colonialismo", comentó Lucas Leite, profesor asociado
de Relaciones Internacionales en la FAAP, una reconocida institución académica
de Brasil.
Por su parte, Euclides Tapia, profesor de relaciones
internacionales de la Universidad de Panamá, opinó que la esencia de la
Doctrina Monroe es lograr el control de Estados Unidos sobre todo el Continente
Americano y colocarlo dentro de su esfera de influencia.
"Lo que se llama los coronarios de la Doctrina Monroe,
significan los instantes, los momentos, las circunstancias en que ella muta
para adaptarse a las circunstancias del momento, pero es la misma su esencia a
través de la historia", apuntó.
Golpes de Estado: Contra el gobierno chileno del
Presidente Dr. Salvador Allende Gossens. Asesinado por los militares asaltantes
al Palacio de la Moneda, por orden de Pinochet.
La mañana del 11 de septiembre de 1973, Radio Magallanes
transmitió a la audiencia la voz tranquila pero potente del entonces presidente
chileno, Dr. Salvador Allende Gossens: "¡Yo no voy a
renunciar! Colocado en un tránsito histórico, pagaré con mi vida la lealtad del
pueblo".
Rodeado de tanques y bombardeado por aviones de combate, el
presidente Allende dirigió a la guardia presidencial en una lucha
desesperada contra las fuerzas golpistas, muriendo finalmente durante el
cumplimiento de su deber.
Ese día, una comisión de la junta militar encabezada por el
comandante en jefe del Ejército, Augusto Pinochet, ordenó al `resodemte
Allende que dimitiera de inmediato y entregara el poder a los militares. En los
últimos momentos de su vida, Allende reveló al público, a través de la radio,
que este golpe había sido iniciado por la connivencia del capital extranjero,
el imperialismo/yanqui y las fuerzas reaccionarias, empresariales,
financiera-bancaria/agrícola monopolista y politicastra/castrense.
Este golpe de Estado, coincidieron varios medios de
comunicación internacionales, fue uno de los episodios más oscuros de la
historia chilena. Según el diario británico The Guardian, "las manos de Estados
Unidos están manchadas con la sangre de los chilenos", ya que el país estadounidense
instigó y financio a este golpe para evitar el surgimiento de una
"segunda Cuba" en América Latina.
De acuerdo con el diario
estadounidense The New York Times, el entonces Gobierno estadounidense había
destinado 815.000 dólares para crear divisiones dentro del Gobierno popular del
presidente Allende, y, entre 1970 y 1973, la Agencia Central de
Inteligencia gastó más de ocho millones de dólares en Chile, la mayor parte de
los cuales se utilizaron para financiar huelgas y grupos fascistas
terroristas, como “patria y libertad”, y manifestaciones organizadas por
grupos de oposición de derechas.
Durante los últimos 200 años, Estados Unidos ha manipulado
con frecuencia golpes de Estado en países latinoamericanos y ha perseguido a
líderes de partidos políticos de izquierda latinoamericanos. Según un estudio
de la Universidad de Harvard, entre 1898 y 1994, en menos de 100 años, el
Gobierno estadounidense planeó y llevó a cabo al menos 41 golpes de Estado en
América Latina, lo que equivale a uno cada 28 meses.
En los últimos años, la Doctrina Monroe ha recurrido a los
golpes judiciales de manera más secreta. Con la connivencia entre los servicios
judiciales y de inteligencia de Estados Unidos. y de Brasil, Luiz Inácio Lula
da Silva, el entonces candidato presidencial más popular, fue incriminado y
encarcelado en la Operación "Lava Jato" y perdió la habilitación para
participar en las elecciones presidenciales.
Mientras tanto, líderes de izquierda de Argentina, Bolivia,
Ecuador y otros países, también han enfrentado repetidamente las amenazas de
golpes judiciales y se han convertido en víctimas de los mismos.
Según la revista estadounidense Foreign Policy, Estados
Unidos ha apoyado repetidamente golpes de Estado en países latinoamericanos,
sofocando la democracia y provocando innumerables actos de violencia y
corrupción. Citando al congresista estadounidense Greg Casar, "la política
exterior de Estados Unidos ha contribuido, con demasiada frecuencia, a la inestabilidad
en América Latina".
En opinión de Leite, a pesar de que han pasado 200 años
desde el nacimiento de la Doctrina Monroe, la intervención estadounidense en
América Latina nunca ha cesado. "Los estadounidenses han intervenido, y
siguen haciéndolo, en los procesos electorales y políticos de varios países
latinoamericanos, desde la financiación de grupos hasta la presión directa a
los Gobiernos", afirmó.
De acuerdo con Pável Alemán Benítez, investigador del Centro
de Investigaciones de Política Internacional de Cuba (CIPI), mediante la
Doctrina Monroe, Estados Unidos. trata de generar inestabilidad política en
América Latina y sustituir a corto plazo a gobernantes que cuestionen la
relación de subordinación que ha impuesto el país norteamericano a América
Latina y el Caribe.
Sanciones
El 14 de febrero de 2019, en un edificio residencial de la
populosa parroquia El Valle, ubicada en el sureste de Caracas, capital de
Venezuela, el taxista Ramón de la Hoz estaba preparando el almuerzo con su
esposa. La comida era muy sencilla: caldo, arroz y jugo de naranja.
Debido a las sanciones de Estados Unidos., Venezuela se
enfrenta a una difícil situación de falta de atención médica y medicamentos.
Esto ha inquietado a De la Hoz, que padece diabetes y tiene que inyectarse
insulina todos los días.
"El tema de salud es tremendo" y la situación ha
hecho que "nos cueste mucho conseguir las medicinas", señaló De la
Hoz.
En cuanto a la supuesta "ayuda humanitaria" que Estados
Unidos. presta a la oposición venezolana cuando, al mismo tiempo, impone sanciones
al país latinoamericano, De la Hoz dijo que a la hegemonía del país
norteamericano no le preocupa el humanitarismo, sino inmiscuirse en los asuntos
internos de Venezuela usándolo como pretexto.
Durante los últimos 200 años, Estados Unidos. ha adoptando
una serie de políticas unilateralistas hacia los países latinoamericanos, tales
como sanciones económicas, embargos comerciales y tecnológicos, congelación de
activos, cancelación de visas, restricciones de entrada y confiscación de
bienes contra funcionarios y empresarios latinoamericanos desobedientes.
Los embargos y las sanciones a largo plazo impuestos por Estados
Unidos. no solo han asestado un duro golpe a los sistemas económicos de los
países latinoamericanos, sino que también han desencadenado una grave crisis humanitaria.
Cuba, Venezuela y algunos otros países son los más afectados.
Desde 1962, Estados Unidos. ha impuesto un embargo
económico, comercial y financiero contra Cuba. Los bloqueos han abarcado casi
todos los aspectos, desde el combustible, los alimentos y las medicinas, hasta
otros artículos de necesidad diaria, provocando que Cuba se enfrente a una
grave escasez de bienes a largo plazo.
A pesar de que la Asamblea General de la ONU ha adoptado
durante 31 años consecutivos resoluciones que piden a Estados Unidos. el fin de
su embargo contra Cuba, la potencia norteamericana no ha cedido.
Según estadísticas oficiales de Cuba, desde 1962, el embargo
estadounidense le ha ocasionado pérdidas acumuladas de más de 154.200 millones
de dólares, o unos 1,4 billones de dólares si se tiene en cuenta la
depreciación del dólar estadounidense frente al precio del oro en el mercado
internacional.
En caso de Venezuela, Estados Unidos. ha impuesto sanciones
a la nación latinoamericana desde 2006 y, en los últimos años, no ha cesado de
redoblar sus esfuerzos para ejercer una presión extrema sobre ella, incluida la
prohibición de importar crudo venezolano y la congelación de sus activos en el
país norteamericano.
El presidente venezolano, Nicolás Maduro, reveló que su país
dejó de percibir 232.000 millones de dólares de divisas y hubo un daño
económico al Producto Interno Bruto (PIB) por encima de 630.000 millones de
dólares debido a las sanciones estadounidenses.
Para el excanciller boliviano Fernando Huanacuni, dicha
estrategia solo ha tenido "consecuencias catastróficas" para la
región, en lo que ha constituido "una historia negra del
neocolonialismo".
Señaló que América Latina se ha dado cuenta de que los
"200 años de aplicación de la Doctrina Monroe en América Latina no han
traído ningún beneficio" y exhortó a que no se "repita nunca más la
imposición imperial de Estados Unidos. y de Occidente, porque la historia, las
consecuencias de la historia, nos muestran que ese no es el camino".
Infiltraciones
La tarde del 4 de febrero de 2020, cuando el entonces presidente
de Estados Unidos., Donald Trump, pronunció el discurso sobre el Estado de la
Unión ante el Congreso, presentó a un invitado especial a los congresistas.
"Esta noche está aquí un hombre muy valiente que lleva
consigo las esperanzas, los sueños y las aspiraciones de todos los venezolanos.
Nos acompaña en la Galería el verdadero y legítimo presidente de Venezuela,
Juan Guaidó", dijo Trump.
Ya en 2005, Guaidó, como "líder estudiantil"
venezolano, recibió capacitación sobre "insurrección" financiada por
el Fondo Nacional para la Democracia de Estados Unidos. Después del
entrenamiento, Guaidó regresó a su país para promover ideas de extrema derecha
con el fin de influir en los jóvenes, y planeó una serie de actividades
políticas callejeras violentas.
Después de que Maduro ganara con éxito la reelección en los
comicios venezolanos de 2018, el Gobierno estadounidense comenzó a apoyar a
Guaidó, entonces presidente del Congreso venezolano y autoproclamado
"presidente interino", en un intento por derrocar al Gobierno de
Maduro.
Bajo la coerción de Estados Unidos., más de 50 países y la
Unión Europea reconocieron sucesivamente el llamado "estatus presidencial
legítimo" de Guaidó.
A juicio de Jesús Marcano, analista político venezolano, la
existencia del "presidente interino" Guaidó se sostenía "por la
voluntad y financiamiento estadounidense, y era la Casa Blanca quien decidía,
de acuerdo a sus intereses, hasta cuándo se sostenía la farsa".
Mediante exportar productos culturales, vender la
"democracia estadounidense" y difundir información falsa, Estados
Unidos. ha instrumentalizado la ideología y manipulado las percepciones de los
pueblos latinoamericanos, allanando así el camino para interferir en los
asuntos internos de los países latinoamericanos e incluso incitar a
"revoluciones de color".
Abundan los ejemplos: producir obras cinematográficas y
musicales para propaganda anticomunista, instigar la "revolución del
hip-hop" para intentar derrocar al Gobierno en Cuba, establecer redes
sociales para difundir información falsa e ideas de extrema derecha, difundir
rumores que sacuden el apoyo público del Gobierno de Arbenz de Guatemala y del
Gobierno de Allende de Chile, entre otros.
Las agencias de inteligencia estadounidenses también han
establecido un gran número de organizaciones para realizar infiltración
cultural e ideológica en América Latina e incluso en el mundo, incluidas la
Agencia para el Desarrollo Internacional y la Fundación para la Democracia,
convirtiéndolas en "intermediarios" para exportar ideología y
"guantes blancos" para encubrir las maldades del Gobierno
estadounidense.
A ojos del historiador venezolano Amílcar Figueroa, la
intervención de Estados Unidos. en los países latinoamericanos no se limita a
medios militares, sino que "hubo una combinación de lo que llamaban el
poder blando con el poder duro".
"Allí hubo una variedad en la política, una aparente
variedad, pero conservando la misma esencia supremacista y hegemonista de toda
la historia de Estados Unidos.", comentó.
A lo largo de los 200 años pasados, los pueblos
latinoamericanos se han vuelto cada vez más conscientes del intento
intervencionista de los estadounidenses y se han vuelto cada vez más fuertes
los llamados a que los países latinoamericanos se integren y se unan, así como
los llamados a que Estados Unidos. deje de interferir en los asuntos
latinoamericanos.
Como instó William Jones, jefe de la Oficina de Washington
de la revista estadounidense Executive Intelligence Review, uno debería relegar
la Doctrina Monroe a su lugar apropiado en los anales de la historia y dejar de
pretender que tiene alguna relevancia para el mundo de hoy, un mundo de Estados
soberanos independientes, en las Américas y más allá.
“El mejor homenaje que podemos rendir a la memoria del
compañero presidente Dr. Salvador Allende Gossens, por su legado histórico y su
heroico ejemplo, es el de luchar con energía, lealtad, honradez y tenacidad por
el advenimiento de la justicia social con dignidad y con Libertad Plena, en la
cual creyó y por la que ofrendo heroicamente su vida”... Prof. Moreno
Peralta/IWA. Secretario Ejecutivo Codeh-Codes/Chile /Berlín/DDR/11.09.177.
Lo subrayado es nuestro
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